Trabajadores de Maessa, empresa auxiliar de mantenimiento eléctrico de Navantia con representación sindical de UGT y CCOO, se manifestaron ayer a las puertas de la factoría isleña para reclamar el mantenimiento de sus puestos de trabajo ante la previsión de una "drástica" pérdida de empleo por la caída de pedidos en Navantia.

Según explicaron fuentes de la Federación del Metal, Construcción y Afines (MCA) de UGT, la plantilla ha contado en la protesta con el apoyo de trabajadores de otras empresas de la industria auxiliar naval y de la propia federación ugetista que, desde hace dos años, viene denunciando que el 85% de las pymes de la Bahía de Cádiz dependen de la industria naval por lo que son "las primeras y grandes perjudicadas por el déficit de trabajo que registran los astilleros".

De hecho, insistió ayer UGT, "la imagen de polígonos industriales y centros de trabajo de la zona vacíos es lamentable", así como el "nivel de desempleo que están padeciendo los trabajadores del metal".

En el caso de Maessa, la plantilla teme una "importante" reducción de empleo basándose en que el pliego de condiciones que ha publicado Navantia para licitar el nuevo servicio de mantenimiento, que es recortado en casi un 50% de su presupuesto, al margen de que excluye el centro de Carenas de Cádiz cuyo mantenimiento pasa a la plantilla propia de Navantia.

Una situación que consideran sólo puede repercutir de manera negativa en sus puestos de trabajo.

Por todo ello, MCA-UGT aprovechó la concentración convocada en la mañana de ayer a las puertas de las instalaciones isleñas de Navantia para reclamar "un impulso político" que sirva para reindustrializar la Bahía de Cádiz y su entorno y dirigirla hacia otros sectores, reforzando a la vez sectores estratégicos de esta comarca como el naval y aeronáutico.