Sólo llevaba Manuel María de Bernardo al frente de la Alcaldía de San Fernando unos pocos días cuando mantuvo la primera de una serie de reuniones para sacar adelante la rehabilitación del Puente Zuazo y las fortificaciones anejas. De eso ha llovido mucho -y más en estas últimas semanas- y parece que al fin se ha llegado a la etapa final. Tras meses de promesas en el calendario, por fin un hecho real dibujó ayer una sonrisa en el Ayuntamiento. El Ministerio de Fomento, y más concretamente la Demarcación de Carreteras del Estado en Andalucía Occidental, anunciaba en el Boletín Oficial de la Provincia (BOP) la expropiación de 15 propiedades en la N-340 entre el punto kilométrico 673,4 y 674,2.

Para ejecutarla inicialmente tiene que realizarse el levantamiento de acta previo a la ocupación, una actuación que se llevará a cabo el próximo 15 de marzo. Se trata, en definitiva, de la desaparición de una serie de negocios -y algunos domicilios- que durante años se han ubicado allí y que ahora, debido a esta importante intervención, tendrán que desaparecer. Entre ellos está, por ejemplo, una chatarrería o un club nocturno que ya está cerrado.

Pero también hay propiedades de otras empresas como Blennius, dedicada a la piscicultura o Isla de León S.A., entre otras. Así, las 15 expropiaciones se reparten de la siguiente manera: tres de ellas son de propietario desconocido, otras seis tienen a su propietario afincado en la localidad de San Fernando, otras cinco en Puerto Real y una en Málaga, al pertenecer a la entidad bancaria Unicaja.

Esta actuación comprende el último y necesario paso que debe darse para que finalmente pueda comenzar la rehabilitación en sí. Un paso que se desarrollará por procedimiento de urgencia y que incluso podrá compatibilizarse con el arranque de esta ambiciosa intervención, sobre la cual todavía no se ha anunciado adjudicación. Sin embargo, sí ha trascendido una posible fecha de comienzo, en los primeros compases del mes que viene, aunque este anuncio no ha sido confirmado. De ser así, esta primera fase de obra, que se centrará en la rehabilitación del Real Carenero y las baterías defensivas que lo rodean, podría estar lista justo para finales de verano, que es cuando la efeméride del Bicentenario alcanzará su culmen con la celebración del 24 de Septiembre.

Esta agónica cuenta atrás avanza por fin de esta manera sin más vuelta atrás, tal como apuntaba el propio De Bernardo, quien ayer mostraba su satisfacción por la noticia e incidía en que esta expropiación podía compatibilizarse con el inicio de la obra. "Hay zonas privadas como éstas, pero también públicas y en ésas se puede intervenir desde ya. Este trámite tan importante nos da esperanzas para ver resultados positivos este año", apuntaba.