EL principal problema del Cádiz en las últimas temporadas ha sido la falta de claridad de ideas. Esto ha afectado al club en sus vertientes económica y deportiva, con los consiguientes errores. Pero también a un sector de la afición (no a toda, por fortuna). Así algunos creen que lo más importante es que Antonio Muñoz no sea el accionista mayoritario del Cádiz. Echarlo se ha convertido en el principal objetivo de sus vidas, caiga lo que caiga, incluido el propio Cádiz. Y no se dan cuenta, o lo disimulan, de que el principal objetivo de un cadista es que el Cádiz vaya bien, que gane y que salga del pozo.

Algunos pensarán que es imposible que el Cádiz vaya bien si está al frente Muñoz. Ya he explicado para los que desconocen el funcionamiento elemental de una empresa (el Cádiz es una empresa deportiva) que una cosa es la propiedad y otra la gestión. En este caso, la gestión de la temporada estará a cargo de uno nuevo que ha aparecido por aquí: Enrique Pina. Y además, tiene una opción preferente para convertirse en el accionista mayoritario. Hay que darle un margen para actuar. Hasta las oposiciones más duras conceden 100 días de tregua a los gobernantes. Sin embargo, en Cádiz, algunos tienen las escopetas cargadas contra Pina desde antes de que llegara. Con toda la pinta de que el tiro les va a salir por la culata, eso sí.

Unos critican que Pina ya ha puesto sus condiciones para seguir a final de temporada. Otros afirman que viene a ganar dinero. Tonto sería si no pusiera condiciones y viniera a perder dinero. ¿A qué venían ese sevillano que nunca hizo nada en el mundo del fútbol, o los brasileños tiesos que no lo compraron? Tengamos un mínimo básico de sensatez.

Entre lo realizado por Pina en estos días, aparte de ceder a un centrocampista como Héctor Yuste que ha sido titular en Segunda A la pasada temporada, hay un dato que me parece importantísimo: que piense en poner a su padre de presidente. Nadie colocaría a su padre de presidente si viene aquí a quedarse con el público. Excepto que fuera un sieso manío, nadie va a exponer a su padre a que le digan de todo en el palco a cambio de nada. Si eso se cumple, será señal de que Pina ha venido en serio.

La plantilla, por lo poco que se ha visto, tendrá mejor aspecto que la que hubiera configurado Suárez sin un euro. Puede funcionar o no. Pero si es que no, seguro que intentará rectificar en el mercado de invierno, cambiando a varios. El Cádiz no se puede permitir un fracaso, pero a él tampoco le interesa.

Y otra aclaración: apuntarse como abonado no es darle tu dinero a Antonio Muñoz. Te abonas para ver al Cádiz. Te abonas porque eres cadista y sigues a tu equipo. Habría que comprobar si quien dice que no te abones se ha abonado alguna vez. Uno compra un libro para leerlo, no para darle el dinero al editor de Planeta. Uno va al cine para ver la película, no para forrar al propietario del multicines. Uno se compra un coche para conducirlo, no para enriquecer a Citroen, a Ford, o a Mercedes.

No hace falta ser muy listo para saber que el Cádiz de esta temporada tendrá más abonados que la anterior. Aunque le fastidie a los resentidos. Hay que dar a Pina, de momento, un voto de confianza.