MI amigo Jesús el taxista sigue a la espera de un guiño a su sector por parte del Ayuntamiento. Me cuenta que en unos días se hará público un nuevo endurecimiento de su "condena", como taxista, a rendirle total "pleitesía" al Ayuntamiento. Es realmente necesario tener reglado y controlado a este colectivo que nace ya con la fama de la picaresca con la que siempre se le ha relacionado. Pero no hay que olvidar que también se convierte en todo un escaparate de la ciudad. Incluso, en ocasiones, en la única persona con la que cruza dos palabras ese turista que se baja unas horas de un crucero. Así que no le viene mal un guiño con el que sentirse algo más seguro y confiado. Son muchas horas esperando un viaje que casi nunca supera los 4 ó 5 euros, como para, encima, tener que estar luchando contra una Administración que ve en ellos no más que una buena fuente de ingresos. No cuesta tanto.