El asunto de las barbacoas es muy delicado en esta ciudad donde parece que meterles mano es atentar contras las santas tradiciones de los gaditanos. El Partido Popular las alentó y cuando el monstruo se les fue de las manos tuvo que tomar medidas para volver a domesticarlas. Después de buscar el Récord Guinness, eliminarlas hubiera sido una contradicción para ellos y una postura difícilmente explicable ante la ciudadanía, porque no nos podemos olvidar que en temas como estos los intereses electorales van muy por encima de los ecológicos. El actual equipo de Gobierno primero aumentó la zona para hacer las barbacoas por ese intangible llamado demanda ciudadana de la que hacen tanto gala. Ahora sí han dado un paso adelante y han decidido crear una mesa para decidir su futuro. Algo es algo pero ahora los tiros van a ir por hacer una consulta popular. Eso no es otra cosa que escurrir el bulto y tratar de que otros tomen la decisión. Mejor que tiren el penalti los otros no vaya a ser que lo falle.

Javier de Torre, el subdelegado del Gobierno, se ha convertido en el azote del actual equipo de Gobierno por parte del Partido Popular. En menos de un año desde que se produjera el cambio de inquilino en el despacho de Alcaldía de San Juan de Dios, ya se han producido varios choques. El izado de la bandera republicana y ahora el origen de la denuncia por una actuación de la Policía Local en la calle Rosa bajo el amparo de la Ley Mordaza han sido los últimos roces. Desde que desapareció la figura del gobernador civil por la de subdelegado del Gobierno, los que habían ostentado este cargo lo habían hecho con un perfil bajo sin meterse en demasiados charcos políticos, como Miguel Osuna y Sebastián Saucedo, popular el primero y socialista el segundo. Javier de Torre ha roto con ello y no duda en atacar a diestro y siniestro a los partidos rivales. Ahora su presa preferida es la del Gobierno local.

La antigua fábrica de Altadis va camino de ser el eterno proyecto. Que si una tabaquera con dudosa viabilidad, que si la Ciudad de la Justicia o ahora la Comisaría Provincial de Cádiz. Ruido, mucho ruido, como la canción de Sabina. La Junta sigue poniendo el foco allí para la Ciudad de la Justicia para desviarlo de su inacción a la hora de sacarla adelante en su planteamiento original. El Gobierno central en el mismo sentido pero para la Comisaría y que nadie se acuerde que llevamos recibiendo visitas de ministros y secretarios de Estado de todo pelaje que nos vendían la moto de un proyecto que nunca llegamos a ver. Siempre queda bien hablar de castillos, aunque estén en el aire. En todo este desconcierto sale Teófila Martínez que trata de que no se olvide que eso tiene un uso industrial, contradiciendo los deseos del Gobierno central que de momento dirige su propio partido.

La Autoridad Portuaria y el equipo de Gobierno iban a firmar esta semana un convenio para favorecer que el muelle gaditano se convierta en puerto base de cruceros. Todo estaba preparado para la firma, que no es ni más ni menos que un protocolo de intenciones, porque la decisión final la tienen las propias navieras en este asunto, pero se suspendió apenas una hora antes de llevarla a cabo ante los medios de comunicación. Al equipo de Gobierno de Por Cádiz sí se Puede le entraron dudas con un punto del convenio, por lo que decidieron estudiarlo más, dejarlo para más adelante y suspender la firma y la posterior rueda de prensa para sorpresa de todos los que estaban esperando a la misma.

Hace dos semanas reflejábamos que los carteles que hay en toda la ciudad referentes a la lucha contra la violencia de género tenían como fondo el morado podemita. Portavoces del Ayuntamiento especifican que este color se ha usado en muchas reivindicaciones contra este tipo de violencia, aunque no es el único porque también está el naranja entre otros.

Más vale que el equipo de Gobierno consiga colocar el espacio de la Tribuna del Estadio Carranza que está destinado a un hotel porque como no pueda hacerlo va a tener serios problemas para cuadrar el presupuesto. El interventor ya lo advierte en su informe, hay muchos gastos que dependen de ingresos esporádicos o de dudosa realización, léase los locales del Carranza. Eso plantearía un problema y es que habría que reducir de todas las partidas para tratar de mitigar la ausencia de esos 9,8 millones de euros. Los partidos de la oposición vienen advirtiéndolo desde que se está hablando de los presupuestos de 2016, pero siguen ahí en las cuentas. Esos 9,8 millones vienen a ser como el cuento de la lechera, que estaban más en la cabeza que en el bolsillo.

Entre tanto, el martes habrá Junta de Portavoces previa al pleno extraordinario del viernes. Por Cádiz sí se Puede necesita el apoyo del PSOE para que sus primeros presupuestos obtengan la bendición en el salón de plenos. Una de las dudas principales que tenía el equipo de Fran González era la de los ingresos en el aire del Estadio Carranza, además de que quería incluir una serie de puntos para meter algunas propuestas socialistas. El equipo de Gobierno tiene de aquí al viernes para responder a lo del Carranza y si hay un plan B preparado en caso de que no vengan los 9,8 millones de euros. No obstante, no es la primera vez que el PSOE puede darle el apoyo a los podemitas sin tener todas sus preguntas respondidas. Ocurrió para la investidura del alcalde José María González, donde nada de lo que se pidió, como el proceso de remunicipalización, fue aclarado. Entonces pesó más quitar a Teófila Martínez.

Entre una cosa y otra, el actual equipo de Gobierno no va a aprobar los presupuestos hasta casi la mitad de año. Una vez que lo consiga ya se les puede analizar por sus hechos y no cabrán las excusas. El PP estuvo recordando la herencia económica de Carlos Díaz hasta casi que se fueron y los actuales gestores van por el mismo camino. Pero las cuentas ya son las suyas.