El Alambique
Rafael Morro
Lo que la verdad esconde
Menos mal que aún tengo guardada, esa llave de bronce, donde guardo los recuerdos de aquel primer piso de sol, donde con mi padre comencé a aficionarme a los toros. Soy consciente que, de niño, todo se vive con otra intensidad a la que hoy puedo estar viviendo; pero llego a pensar, y no soy el mejor aficionado ni por asomo; que algo no estamos haciendo bien.
Quiero generalizar en todos los aspectos, aquí la culpa es del conjunto de personas que a día de hoy mantienen viva la Fiesta Nacional en nuestro Puerto.
Y es que cuando miro atrás en el tiempo y hago memoria de aquellas tardes con Curro Romero, Galloso, El Litri, Enrique Ponce, Emilio Muñoz, Espartaco, Cesar Rincón, entre otros, recuerdo con mucha melancolía esos años.
En esos años sentía que nuestra Plaza tenía un carácter serio, con criterio y que incluso hubo una Peña, llamada Tendido 7 (aunque se ubicaba en el tendido 4), que, aunque a veces no se les entendiese, hicieron cambiar alguna que otra decisión en la Presidencia. Incluso el respetable, se hacía respetar más que hoy en día.
No sé, si la necesidad de tener que vivir todo en primera persona, nos hace llegar al punto en el que, si viene nuestro torero, tenemos que verlo triunfar al precio que sea, por la sencilla razón de que hemos estado ahí.
Algunos me vienen, que si la Plaza es de segunda categoría y es normal que pasen estas cosas. ¿Perdona? La categoría se puede crear sentado en el tendido y actuando en consonancia con lo que sucede en el ruedo, al igual que se puede hacer Presidiendo el festejo.
Una pitada, no puede cambiar el criterio de un Presidente que es capaz de sentarse frente a doce mil personas; por eso, para estar ahí, hay que tenerlos bien puestos. La apertura de la Puerta Grande, no se puede regalar cada tarde de toros. Con eso, lo que se hace, es desprestigiar esa categoría efímera de la que todos hablan que tiene nuestra plaza, pero que muchos aficionados locales y visitantes, pañuelo en mano, no paran de quitarle.
Pregunto si ese mismo pañuelo lo sacarían en otras Plazas.
Aún quedan tres tardes, una muy gorda y aún se puede remediar. ¿Los tendremos todos bien puestos?
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