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Análisis

José guerrero 'yuyu'

Este es el camino

Para ese clima de tranquilidad no ayuda la incertidumbre sobre el futuro de Cervera

Un servidor pedía la semana pasada un empujoncito para recuperar confianza y distancia en la tabla. Y claro, es inevitable que cuando alguien pide algo así salten los repartidores de carné de cadistas para tirarse al pescuezo de manera inmediata, con los consabidos argumentos del derrotismo, de la falta de cadismo, etc, etc. Pues sí, hacía falta ese empujoncito que, por cierto, una vez que se consigue es celebrado por todos, incluso por los que lo creían necesario pero estaban mejor sin decirlo porque era políticamente incorrecto decirlo en voz alta.

El problema de cierto sector del cadismo es que no contextualiza las cosas. La fiebre por ser más cadista que nadie se lo impide. Y las cosas se piden en el momento exacto en que se piden, no mirando todo lo anterior. Nadie estaba dudando del equipo ni minusvalorando lo conseguido hasta ese momento. Lo único es que con los números de las últimas 6 jornadas se estaba apretando todo y era necesario dar un golpe de efecto. Se consiguió en Las Palmas y la jornada no pudo acabar mejor para los intereses cadistas. La jornada terminó con el Cádiz a ocho puntos del tercero (a expensas de lo que haga el Zaragoza en su partido aplazado ante un coco como el Mirandés) y a nueve puntos del cuarto clasificado. El Cádiz tiene potencial de sobra para retornar a la senda del triunfo más habitualmente. Que el parón podía llegar se sabía.

El problema del Cádiz de estas últimas dos temporadas, y la actual, creo que nunca ha sido un problema de juego ni de calidad, ha sido un problema mental. El equipo tiende a bloquearse cuando no le salen las cosas y le cuesta la misma vida volver a ser lo que solía ser. Y como en muchos deportes, en el fútbol el problema psicológico es bastante más peligroso de lo que se cree. Pero con dos victorias y un empate en los tres últimos partidos parece que ha vuelto la calma al vestuario y a la tabla. ¡Y buena falta que hacía!.

Veremos a ver qué pasa en estos 15 partidos que quedan hasta final de temporada. El Sabio de Hortaleza, Luis Aragonés, decía que "lo importante son los últimos 8 partidos". Es decir, llegar ahí con cuantas más opciones sea posible y ser el mejor en ese último tramo de liga. La situación actual de los equipos rivales no dice nada, porque esto cambia de un día para otro y mientras no haya huecos insalvables no hay nada decidido. Con la categoría tan igualada la clave va a ser recuperar el factor casa. Al Cádiz le quedan 8 partidos en casa, puntos vitales para el ascenso directo. Ahora lo que se requiere es calma y que no se nos vaya la olla de nuevo. Y para ese clima de necesaria tranquilidad no ayuda nada la incertidumbre sobre el futuro de Cervera.

Según las palabras del entrenador, depende del club y no de él. Yo estoy seguro que todo esto no va a condicionar los resultados del Cádiz, pero no debe ser cómodo trabajar sin saber que va a pasar en un futuro. Lo mejor será ganar hoy y luego, como decían Los Cegatos con Botas… ya veremos.

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