Turismo Cuánto cuesta el alquiler vacacional en los municipios costeros de Cádiz para este verano de 2024

Crítica de Música

Matiné de cine y tapas con la Sinfónica de Sevilla

Un momento de la actuación de la ROSS en el Gran Teatro Falla.

Un momento de la actuación de la ROSS en el Gran Teatro Falla. / JESÚS MARÍN

Un exitoso y largo concierto ofreció la ROSS, la mañana del domingo 12. El Teatro Falla repleto de amantes del género de las Bandas Sonoras Originales, es decir, la música de cine, hecha para el cine. Y también con la asistencia niños entre el público. Bastantes, y de entre ellos, alguno que otro dispuesto a interactuar con la orquesta, con el permiso expreso del director y compositor Fernando Velázquez. Cosa que me parece muy bien, pero que digo yo que quizá también habría que contar con la opinión del resto de los espectadores que, al fin y al cabo, son los que pagan la entrada, y se supone que para escuchar música. Bueno, en cualquier caso, la cosa iba de concierto familiar y ahí nadie se puede llamar a engaño.

Fernando Velázquez, que además de director es compositor, violonchelista y bilbaíno de Getxo (Guecho), trajo un concierto con un programa de mano en exclusiva sobre su producción musical de BSOs.

Y también una "tapa" de propina, totalmente inesperada y fuera de programa: Pasión Vega cantando la canción de Carlos Cano: Dormido entre rosas. Y es que resulta que, además de que Pasión vive no muy lejos del Falla, es amiga personal de Fernando Vázquez con quien ha trabajado en alguna ocasión. El público, que no se lo esperaba, respondió con un gran aplauso.

El concierto tuvo una primera interpretación larga: una suite de la película El orfanato, del cineasta Juan Antonio Bayona. Esta película española de terror, fue interpretada por Belén Rueda y candidata al Goya por la mejor música. La música refleja escenas de tensión, suspense, a la vez que momentos románticos. El coro Ziryab de Córdoba hizo su debut en Cádiz con este tema.

El resto del concierto fue, en palabras del propio compositor, un conjunto de "perlas" de otras tantas películas de las que ha compuesto sus bandas sonoras, como Lope; Crimson Peak; Zipi y Zape 1 y 2; Un monstruo viene a verme; Lo imposible; Hércules. De propina, y como estreno mundial, en palabras del propio Velázquez, una suite de El secreto de Marrowbone, película escrita y dirigida por Sergio Gutiérrez Sánchez.

El concierto de la ROSS, en mi opinión, desaprovechó al estupendo coro Ziryab de Córdoba, que me pareció potente y equilibrado en voces, pero al que se le dio muy poco juego para poder demostrar bien cuáles son sus posibilidades reales.

De las "perlas" de Fernando Velázquez, me quedo con Lo imposible, con una bonita melodía y capaz de llevarte al pensamiento de "hacer lo que se pueda" en los momentos en que todo a tu alrededor parece que se destruye, y muy acertada la alusión al General de los Jesuitas, el Padre Arrupe, único español testigo del desastre de la explosión de la primera bomba atómica en Hiroshima. Por supuesto, con Un monstruo viene a verme, ganadora de un goya a la mejor música.

Citar la interpretación de Lope, con una estupenda melodía de guitarra española, tras una serie de compases iniciales de corte renacentista, y con unas castañuelas, que evocan lo español, acabando con una marcha interpretada por toda la orquesta en un fortísimo.

También destacar la interpretación de Hércules, música para la que Fernando Velázquez se inspiró recordando sus tiempos de vacaciones de niñez en la playa de La Barrosa, y las vistas del Castillo de Sancti Petri, para el que dedicó todo tipo de elogios, salvo que se hayan autorizado las visitas y un bar en su interior.

Después de la "tapa" de regalo con la actuación de Pasión Vega, aún hubo una propina más, fuera de programa: un trocito de la música de la película Sexy killer, morirás por ella, un film de Miguel Martí.

Un concierto de la Sinfónica de Sevilla, que, en mi opinión, ha resultado un éxito de convocatoria de público, y que abre las puertas del Festival de Música Española de Cádiz a otras posibilidades, quizá no tan exclusivas o técnicas, pero sí populares y, por qué no decirlo, muy agradables de escuchar. El público aplaudió con ganas. Enhorabuena.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios