La televisión analógica se despide de la provincia en menos de 24 horas

Si aún no tiene su antena adaptada o carece de un sintonizador de Televisión Digital Terrestre (TDT) en su hogar le queda poco tiempo. En menos de 24 horas todos los municipios de la provincia dirán el adiós definitivo a la señal analógica y la señal digital será la única forma de poder ver su programa favorito de la televisión.

Con el apagón de mañana se culmina un proceso que comenzó en el Campo de Gibraltar, la primera zona de la provincia en dar el salto al sistema digital el 21 de diciembre pasado (salvo Tarifa), comarca a la que ayer se unieron cinco municipios serranos (Alcalá del Valle, El Gastor, Olvera, Setenil de las Bodegas y TorreAlháquime). En el resto de localidades gaditanas, pertenecientes al proyecto técnico de Jerez, el apagón total será mañana miércoles. Según apuntaron fuentes cercanas a la Ministerio de Industria, "Cádiz cumple con los requisitos fundamentales de acceso a la TDT, ya se a través de sintonizadores o de plataformas digitales, y un alto grado de antenización" y por esta razón se dará el paso de apagar la zona que a más población afecta, 980.000 gaditanos.

El paso de una televisión a otra se ha realizado con incidencias "mínimas", apenas "reseñables" en la provincia. El coordinador de Infraestructuras de la Consejería de Innovación, Andrés Fernández, aseguró a este periódico que Cádiz no cuenta con ninguna de las llamadas zonas de sombra, que quedan fuera de la cobertura de esta señal. En la últimas semanas se han realizado algunos ajustes en lugares donde se había detectado algún problema y se han reasignado frecuencias, con lo que "hoy el porcentaje de hogares que ya acceden a la TDT es bastante alto, un 98%", señaló. "El objetivo es que todas las personas que veían la televisión con analógico la vean en digital", agregó Fernández, "porque esta televisión se ve o no se ve, no se podrá ver un canal con niebla como antes".

Esos ajustes se han hecho por ejemplo en la comarca de la Janda, donde se han oído más quejas por la mala recepción. Se han reparado los múltiplex que no funcionaban y ahora ya llegan sin apenas problemas la veintena de canales existentes en la nueva televisión. Este fin de semana incluso Canal Sur hacía presencia en un nuevo múltiplex, aunque sólo unos minutos, ya que mantiene una pugna en las ondas con otro repartidor marroquí que hacía imposible su recepción. Esta coincidencia con canales del país alahuita, sin embargo, no es debido a esta transición, explicó Andrés Fernández, "sino a que Marruecos realizó una serie de pruebas y coincidía con la zona de frecuencia en algunos pueblos. Y esto podía pasar en cualquier momento, no hay que acharcáselo a la TDT".

Fuentes cercanas a Industria recalcaron que a través del Centro de Atención al Usuario puesto en marcha por Industria, no tenían hasta ayer "constancia de incidencias concretas". Aún así, una vez que se apague totalmente la señal, "estaremos alerta", apuntaron, "por si ocurriera algo, debido a la complejidad del proceso, arreglarlo lo más rápido posible". Para aquellos hogares que a partir del mañana no reciban la TDT, casas aisladas o pequeños núcleos, tendrán un último recurso, que será adquirir un receptor satelital o antena parabólica. La podrán comprar con una autorización y cuesta sobre los 300 euros.

Tanto desde la Junta de Andalucía como desde el Ministerio de Industria se ha venido realizando en los últimos meses una campaña de información para que a nadie le cogiera de sorpresa el cambio. Instalación de punto fijos y móviles de información o explicaciones sobre su sintonización y funcionamiento, donde el principal problema relatado por la gente ha sido "enfrentarse a un nuevo aparato en la casa, sobre todo personas mayores".

Con la TDT habrá más calidad de imagen y sonido pero es más aún. Los servicios interactivos y multimedia permitirán conectarse a Internet, ver el correo electrónico, videoteléfono, guías electrónicas de programa o incluso hacer la compra o reservar mesa en un restaurante, todo ello sin movernos del sofá. El futuro ya está aquí.