En los duros tiempos que corren, el medio ambiente no es, lógicamente, el problema que los gaditanos ni andaluces consideran más importante. Sin embargo, el 63,2% de ellos dicen estar muy preocupados por la situación de la calidad del aire y de los entornos urbano, rural, forestal y marino y procura preservarlos con su comportamiento. Y para un 5,2% y el 7,4% en Andalucía es incluso el problema más importante. El sexto concretamente, después y a mucha distancia del paro y la economía (91% y 93%), la política (8,9% y 11,5%), los problemas sociales (6% y 9%) y la seguridad ciudadana (5,5% y 8,1%). Pero, curiosamente, por encima de la educación (5,8% y 6%), la salud (4,5% y 5,8%), la inmigración (2,5% y 4,9%), las infraestructuras (1,8% y 4,1%) e incluso la vivienda (4% y 4,5%). Estos son algunos de los datos que se desprenden del Ecobarómetro 2010, una encuesta elaborada por el Instituto de Estudios Sociales Avanzados de Andalucía (IESA) que pretende medir el conocimiento, la preocupación y la valoración de los ciudadanos sobre asuntos ambientales y su gestión. Silvia López, delegada de la consejería en Cádiz, presentó este informe basado en 3.190 entrevistas en la comunidad autónoma y 402 en la provincia efectuadas en junio y julio pasados.

Pero ¿cuáles son los problemas ambientales que juzgan más importantes los gaditanos?: tres asuntos que dependen directamente de las Corporaciones locales y que resultan más graves y persistentes en los grandes núcleos urbanos de población: la suciedad en las calles (un 27,2% frente a un 28,4% en Andalucía), los residuos sólidos urbanos, es decir, la basura, (un 25,9%, ocho décimas más que en Andalucía) y la falta de parques y jardines (un 24,9% y 21%). A los anteriores les siguen el deterioro del paisaje urbano (un 16,1% y 18,4%), la contaminación del aire (18,5% y 18,1%) y la calidad del agua del grifo (12,7% frente al 17,6% en Andalucía). A nivel autonómico, lo que más preocupa son los incendios forestales y la contaminación de playas y mares. Por primera vez desde hace diez años, la falta de agua queda en el último lugar por razones obvias.

Precisamente, el control de los incendios forestales en un año especialmente benigno, es la actuación ambiental más valorada de entre todas las que desarrolla la Junta de Andalucía. Casi la mitad de los gaditanos (el 47,5%) la consideran positiva o muy positiva. A la lucha contra el fuego le siguen la protección de espacios naturales (el 46% la considera positiva), la promoción de la educación y la participación ambiental (40,2%) y la conservación de la flora y fauna (39,5%). La gestión de las aguas, el 34,9% la considera positiva o muy positiva, el 23,6%, regular y el 15,2%, mala o muy mala.

Pese a la abundancia de lluvias de este año, parecen haber calado las campañas de fomento del ahorro de ese bien tan escaso que es el agua. El 83,2% de los gaditanos (frente al 82,1% de los andaluces) asegura tomar medidas con bastante frecuencia para no despilfarrarla. Y el 81,7% también se declara ahorrador energético, porque suele controlar la calefacción y el aire acondicionado y comprar bombillas de bajo consumo.

No obstante, los residentes en Cádiz suspenden a la hora de comprar productos respetuosos con el medio ambiente (sólo el 29,6% dice hacerlo con bastante frecuencia) y sólo aprueban en los desplazamientos locales a pie, en transporte público o bicicleta, que nada más que suele practicar el 59,6%, frente al 65% de la media andaluza y un 76,6% en Granada.

En cualquier caso, la percepción del medio ambiente local es mayoritariamente muy buena o buena para los gaditanos (un 36,5%) o regular (un 34,2%). El 25,4% la considera mala o muy mala. Esa percepción empeora cuando se trata de valorar la situación autonómica o global.

Por último, el Ecobarómetro deja constancia de cada vez son más los ciudadanos que reciclan con bastante frecuencia.