Los detallistas de la Plaza de Abastos llevan a cabo en estos días los trabajos de traslado de sus enseres al mercado rehabilitado de la Cuesta de Belén en medio del conflicto que les enfrenta al Ayuntamiento desde hace ya más de dos semanas.

No hay todavía acuerdo alguno, como tampoco una fecha definitiva de apertura de las instalaciones remodeladas. Con todo, hay que recordar que el Consistorio informó el pasado lunes que "de acuerdo a la última comunicación remitida al representante legal" de los placeros, éstos "cuentan con 15 días para la instalación y apertura de sus puestos". "En caso contrario, de acuerdo a la normativa, perderían la concesión, que saldría a licitación pública", advirtió.

El Consistorio informó el lunes de un plazo de 15 días a los placeros para abrir sus puestos

Entretanto, siguen sucediéndose las críticas de la oposición al Gobierno local del PSOE por la gestión de este asunto. El PP pidió ayer a los socialistas que "dialogue con los comerciantes de la Plaza de Abastos para solventar de una forma definitiva la situación que mantienen como consecuencia de su incapacidad para consensuar". En este sentido, instó al alcalde, Víctor Mora, a que "rectifique y facilite el traslado de los detallistas" al nuevo mercado. La portavoz popular, Ana Mestre, solicitó al regidor que "se baje del 'no' permanente, flexibilizando el autoritarismo con el que está ejerciendo este proceso" y que, a su juicio, "traerá consecuencias negativas para la ciudad".

Por su parte, IU censuró que "además de las injustificadas demoras en la ejecución de las obras, las deficiencias que presentan y los continuos retrasos en la apertura, el Gobierno del PSOE de Víctor Mora hace gala de la falta de humanidad, comprensión, diálogo y consenso que ha tenido siempre con los comerciantes de la Plaza de Abastos". La portavoz izquierdista, Carmen Álvarez, lamentó, igualmente, que IU "no ha tenido aún acceso a los expedientes solicitados el 18 de abril" porque "no se nos ha permitido ver la documentación".

Ciudadanos (C's), a través de su concejala Elena Sumariva, reclamó al Gobierno municipal que "termine el pulso y solucione urgentemente este problema por el bien de la ciudad". Dijo no entender "cómo Víctor Mora, en un supuesto principio de acuerdo, le da a los placeros un ultimátum, lo cual es una forma pobre de resolver el asunto". Rechazó el uso de "prácticas antidemocráticas como las amenazas de las licitaciones de los puestos del nuevo mercado".