El Parque Metropolitano de Los Toruños inicia una nueva etapa con la actuación que está prevista realizar por el Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino de la Demarcación de Costas. La Administración prevé invertir una importante cantidad económica (4.861.389 euros) para una serie de intervenciones muy importantes que modificarán el aspecto actual de este espacio natural. El ambicioso proyecto de 'Restauración Ambiental de Los Toruños' afecta sobre todo a la zona del parque junto a Valdelagrana, y menos a la de La Algaida, ya que en la orilla puertorrealeña del río está previsto tan sólo construir un embarcadero en el límite con los terrenos del campus universitario Río San Pedro.

El grueso de la actuación será pues en Los Toruños, tal como se refleja en el propio proyecto, que se encuentra en exposición pública en la Demarcación de Costas y en la concejalía de Medio Ambiente de El Puerto (antiguo Imucona). El proyecto es obra de los arquitectos César Portela, con la colaboración de Antonio Barrionuevo y Julio Molina, y viene a completar "las actuaciones incluidas en el anteproyecto de 1998", para "dar un sentido de ámbito único" al parque y continuar aquella primera fase del proyecto. Se trata de unificar la imagen de Los Toruños y además "conservar y potenciar los valores de todo tipo" en este privilegiado espacio natural, procediendo en primer lugar a eliminar "intervenciones desafortunadas que a lo largo del tiempo han supuesto una agresión al paisaje y calidad ambiental", y recuperando "los valores existentes en otras épocas". A la vez, el Ministerio de Medio Ambiente pretende introducir nuevos valores arquitectónicos y paisajísticos "respetuosos y compatibles con los existentes, para dar satisfacción a las necesidades actuales y a la nueva reorientación y remodelación de los espacios". De esta forma, Los Toruños refuerza por una parte su vocación medioambiental, y se hace más accesible como espacio lúdico para disfrute de la naturaleza. Para conseguirlo se contemplan siete actuaciones.

La más llamativa y quizás la más reclamada por los grupos ecologistas, es la eliminación del asfaltado a lo largo de todo el itinerario del camino principal. Se suprimirá completamente el asfalto y se reducirá la anchura del camino actual en la totalidad de sus 3.450 metros de longitud, al igual que en los tres ramales que conducen a las explanadas de los antiguos aparcamientos de la playa de Levante (venta Ramoni). La altura de todos estos senderos se elevará de forma artificial respecto a la marisma, mediante el método de desmontar los laterales del camino, y con los sedimentos que se obtenga elevar el nuevo sendero, que será de tierra compactada y más estrecho que ahora.

Otra actuación orientada a la restauración ambiental del terreno es la construcción de una senda de madera en el ramal 2, en el tramo del cruce desde el itinerario principal hasta la playa, que actualmente es de tierra y piedras. Esta senda de madera ya existe en el ramal 3 y en la zona que conduce al puente sobre el río San Pedro y llega hasta el pinar de la Algaida. La nueva 'senda baja de madera' tendrá 850 metros de longitud, irá algo despegada del suelo mediante pilares, y será de madera de elondo. Como aspecto destacable, cabe señalar que esta nueva senda desembocará en un mirador también a construir, el Mirador de la Bahía, orientado hacia el sur, hacia Cádiz, y que según los planos constará de una rampa de 60 metros de longitud y 1,80 metros de ancho que irá creciendo progresivamente en altura hasta una 'placeta' cubierta y con barandillas, que se eleva a 3,60 metros sobre el nivel del mar, con lo que parece que podrá ser accesible para discapacitados.

De igual forma, en el apartado de infraestructuras medioambientales, se construirán un total de cinco nuevos puentes rodados, también de madera, uno de ellos sobre el caño mayor que corta el camino principal del parque, a un kilómetro de la entrada, con una anchura de 4,70 metros, entarimado y pasamanos del mismo material, sustentado sobre pilares.

Otra actuación que ampliará las posibilidades de acercamiento náutico deportivo a Los Toruños son los tres embarcaderos previstos en el río San Pedro, contemplados en el proyecto. El primero de ellos se situará a unos 200 metros de la entrada principal, y se podrá llegar el mismo por una larga pasarela de madera que salvará el nivel de la bajamar y pleamar, hasta llegar al pantalán flotante. Los tres muelles son similares a los de los puertos deportivos, e irán sujetos a tres pilotes pivotantes. Tendrán una anchura de 5 metros por 20 de longitud cada uno. Con los embarcaderos, uno de los cuales se construirá al pie del puente de madera, Los Toruños se harán más accesibles a los usuarios de embarcaciones pequeñas a través del río San Pedro.