El magistrado del Juzgado número 3 de El Puerto, Miguel Ángel López Marchena, decidió anoche prorrogar durante una jornada más las detenciones de Juan Carlos Rodríguez, ex concejal de Urbanismo del Ayuntamiento portuense, de Fernando Jiménez Fornell, jefe de servicio de Licencias del Ayuntamiento, y de su compañera sentimental, también funcionaria del Área de Urbanismo, Milagros Trigo Pacheco. En cambio, ordenó la libertad, pero con cargos y bajo fianza de 3.000 euros, de la arquitecta Isabel Ruiz Vázquez, que junto a Trigo conformaban el estudio de arquitectura Tec.

La decisión judicial se adoptó minutos antes de la medianoche tras una maratoniana jornada de declaraciones en los juzgados portuenses. Los detenidos habían pasado la noche anterior en los calabozos de la Comisaría de la Policía Nacional en El Puerto. Poco antes de la una de la tarde llegaba al Juzgado la primera de las detenidas para declarar ante el juez, Milagros Trigo. Lo hacía esposada y ataviada con gafas de sol oscuras y una gran pamela que le cubría buena parte del rostro, aunque en todo momento presentó una actitud altiva ante la presencia de periodistas en el recinto de los juzgados. Aproximadamente una hora y media después, poco antes de las dos y media de la tarde, llegaba al Juzgado su compañera Isabel Ruiz, también esposada. Nada más bajar del furgón policial que la trasladaba su abogado le ayudó a cubrirse totalmente la cabeza con una chaqueta, lo que unido a los altos tacones que llevaba le hizo avanzar con bastante dificultad hasta llegar al interior de las dependencias judiciales.

Eran las tres y media de la tarde cuando, tras su declaración ante el juez, salía de nuevo Milagros Trigo, esta vez sin esposar, para ser trasladada de nuevo, esta vez para someterse a una revisión en un centro médico de la ciudad en el que había sido intervenida el pasado sábado de una intervención en el rostro, de la que aún tenía algunos hematomas visibles a pesar de las gafas de sol. Tras ser conducida de nuevo a Comisaría, regresaría a las dependencias judiciales hacia las ocho de la tarde. A última hora de la noche de ayer se supo que Milagros Trigo pasaría la noche en el hospital de Puerto Real, precisamente a causa de la operación a la que había sido sometida.

Tras un receso realizado en los interrogatorios practicados durante la mañana, no fue hasta las seis y cuarto de la tarde cuando Juan Carlos Rodríguez y Fernando Jiménez Fornell llegaron al Juzgado. En este caso lo hicieron juntos y ninguno de los dos iba esposado, siendo trasladados en un coche patrulla de la Policía Nacional, en lugar de en un furgón policial como Milagros Trigo e Isabel Ruiz. Desde hacía horas ya se encontraba en el Juzgado la mujer de Juan Carlos Rodríguez, Josefa Lojo, que ha sido imputada y que el pasado miércoles tuvo que estar presente en los registros que la Policía realizó tanto en su domicilio como en la boutique de lujo que regenta junto a su marido en la céntrica calle Larga de la ciudad. Josefa Lojo estuvo acompañada a lo largo de toda la jornada por varios amigos y familiares, permaneciendo en el Juzgado hasta pasadas las doce de la noche, cuando se supo que se prorrogaba la detención de su marido.

La primera de las declaraciones tras el receso fue la de Fernando Jiménez Fornell, que duró alrededor de una hora. El funcionario municipal presentaba un aspecto demacrado y de gran cansancio, tras haber participado el día anterior en los registros practicados en su domicilio y en la sede municipal de Urbanismo y haber pasado la noche en los calabozos de Comisaría. No obstante, la comparecencia más larga ante el juez fue la de Juan Carlos Rodríguez, que entró en el despacho de Marchena hacia las ocho y veinte de la tarde y no salió de allí hasta las once menos cuarto de la noche. También Rodríguez presentaba un mal aspecto físico, aunque pudo intercambiar algunas palabras con su esposa y sus familiares tras su declaración y tras conocer que el juez prorrogaba hasta hoy su detención.

Durante toda la jornada también estuvieron presentes en el juzgado los abogados de los detenidos, Felipe Meléndez (de Juan Carlos Rodríguez), Antonio Domínguez Mompell (de Fernando Jiménez Fornell y Milagros Trigo) y Álvaro Illesca (de Isabel Ruiz).

Tras la declaración de Juan Carlos Rodríguez ante el juez, pasadas las once de la noche, López Marchena mandaba llamar a su despacho a los cuatro detenidos para, en presencia de sus respectivos abogados, comunicarles su situación procesal, saliendo todos ellos del despacho del juez decano hacia las once y media de la noche.

Las cuatro detenciones se habían producido a primera hora de la mañana del miércoles y en las horas siguientes se realizaron registros en los domicilios particulares de los detenidos, en el Área municipal de Urbanismo y en varios negocios y oficinas propiedad de los implicados. El operativo fue llevado a cabo por agentes de la Policía Autonómica, Policía Nacional y personal de la Agencia Tributaria. Las detenciones se produjeron por la presunta implicación del ex edil de Urbanismo, de los funcionarios municipales y de la arquitecta del estudio Tec en varias causas que se instruyen en distintos juzgados portuenses.

Al cierre de esta edición el juez seguía tomando declaración a varios testigos que habían permanecido en dependencias judiciales durante prácticamente toda la tarde. Este periódico ha podido saber que tanto el Juzgado como la Policía han llamado a declarar como testigos a algunos socios de Juan Carlos Rodríguez así como a clientes del estudio de arquitectura Tec.

Se espera que a lo largo de la mañana de hoy las tres personas que continúan detenidas puedan saber ya si el juez decide su puesta en libertad o su traslado a prisión.