La joven herida por un petardo en Jerez en 2007 se somete a otra intervención

Rocío Vázquez,vecina de la jerezana barriada de Los Albarizones, sufre un calvario desde la Nochevieja de 2007: un petardo le alcanzó en la cara, le explotó, y le hizo perder el ojo izquierdo. La joven ha sufrido varias delicadas intervenciones quirúrgicas desde entonces y espera todavía la celebración del juicio oral por el caso.

Rocío ha vuelto a ser intervenida en un centro de Madrid la semana pasada. Los facultativos le han implantado un globo en la frente para reconstruirle la cara al cual le están inyectando distintos productos desde una válvula exterior, explicó ayer la madre, que destaca que "la chica lo ha pasado muy mal desde entonces. Son varias las operaciones que lleva. Ahora tiene la cara desfigurada por la intervención, pero esperemos que vaya mejorando", agregó ayer Paqui, que no se ha separado de su hija ningún momento desde que en la Nochevieja de 2007, vecinos de la misma barriada lanzaron varios petardos para celebrar el Año Nuevo y uno impactó en Rocío. La chica permaneció ingresada en la UCI del hospital Puerta del Mar varios días a consecuencia de las graves heridas. Baste decir que le aplicaron 300 puntos de sutura.

Rocío y su familia confíaban ayer en la pronta celebración del juicio oral para intentar zanjar la historia o, por lo menos, desde el punto de vista legal.

La Policía detuvo a un hombre y a su hijo por su supuesta implicación en los hechos pero en la barriada se apunta a que hay más implicados en un caso que generó gran alarma social, tanto por la gravedad de las heridas sufridas -Rocío perdió también la audición en el oído izquierdo-, como por la venta de productos piroténicos sin control, con consecuencias tan nefastas como las ocurridas en Los Albarizones.