"Si nadie lo remedia, Doña Elena, a corto o medio plazo en nuestras latitudes sureñas coexistirán dos tipos de estancos: el legalmente establecido como concesión administrativa del Estado, y el ilegal, ya en estos momentos sostenido por redes organizadas de distribución que coloca y vende el tabaco de contrabando, de procedencia particularmente gibraltareña, en establecimientos de hostelería, kioscos, tiendas de alimentación, tiendas de conveniencia y ambulantes, macuto en hombro, pregonando su mercancía y su bajo precio". Éste es uno de los párrafos de la misiva que la Asociación Provincial de Expendedores de Tabaco y Timbres de Cádiz acaba de dirigir a la ministra de Economía, Elena Salgado, en la que le instan a que el Gobierno tome medidas urgentes y contundentes para atajar el alarmante incremento del contrabando de tabaco en la provincia.

Los estanqueros, al tiempo, han dirigido otro escrito al director general de Aduanas, en el que igualmente le hacen partícipe de la preocupante situación que atraviesa el sector, que ya sufre pérdidas medias de un 30% a causa del progresivo aumento del tabaco de contrabando.

Con ello, el colectivo sigue batallando para conseguir que el Gobierno tome conciencia del auténtico alcance que el mercado ilegal de tabaco está provocando en Cádiz, y que sigue deparando cierres de estancos, especialmente en la zona del Campo e Gibraltar.

A juicio del colectivo, es preciso que tomen cartas en el asunto, no sólo el Ministerio de Exteriores, al llegar buena parte de la mercancía ilegal a través de Gibraltar, sino también Hacienda (una de las más perjudicadas, por los elevados impuestos que gravan el tabaco) y sobre todo Sanidad.

Porque la asociación no se cansa de repetir que el tabaco de contrabando que está circulando ya por numerosos rincones de Cádiz, gracias a la actuación de mafias organizadas, no está sujeto a ningún control sanitario. Hace escasos días, desde la propia Guardia Civil incidían también en este asunto. No en vano ya se ha detectado en numerosos puntos tabaco falsificado de procedencia china, todo apunta a que envasado y etiquetado en la Unión Europea, que se está dispensando sin garantías ni control hasta en las máquinas expendedoras de los bares.

Con sus reclamaciones, los estanqueros gaditanos pretenden que el Gobierno tome conciencia de la verdadero dimensión del problema y disponga, no sólo más medios, sino hasta específicos, creando incluso un Cuerpo Especial de Intervención permanente, conformado por agentes de la Guardia Civil y de Vigilancia Aduanera.