El Gobierno municipal hizo ayer públicos los datos de un estudio realizado por el Ayuntamiento y la asociación Proactyva que "desvela un cambio importante en las demandas de las personas que solicitan formación y que se encuentran en situación de desempleo en la ciudad, cayendo áreas como la hostelería y la rama administrativa de gestión".

Según el análisis, el 36,94% de las peticiones se refiere a cursos relacionados con el acceso a las nuevas tecnologías y el 32,43%, con diferentes idiomas. Estos datos "contrastan con una disminución de la demanda en formación del sector hostelero, que desciende hasta el 12,61% de los interesados".

Por otro lado, el estudio pone de manifiesto que los usuarios que más demandan la utilización de las herramientas de búsqueda de empleo que actualmente ofrece el Consistorio tiene entre 30 y 45 años (el 62%), y las mujeres superan a los hombres en términos porcentuales (54% y 46% respectivamente). En lo que se refiere al nivel de estudios, el 44% de los demandantes finalizó la Enseñanza Primaria, el 22% hizo Formación Profesional y el 10% completó la Secundaria. El análisis recoge "un dato relevante en relación al descenso del número de usuarios cuyos estudios se corresponden con diplomados o licenciados, de manera que en ambos casos el dato sólo es del 3%".

El estudio, que ofrece cifras relativas al último trimestre de 2012, también refleja que el 35% de los demandantes procede del sector de la construcción; el 16%, del agrícola; y el resto, de servicios, comercio, hostelería, hogar y cuidadores.

La elaboración de este trabajo de periodicidad trimestral está recogida en el convenio de colaboración suscrito en noviembre pasado por el Ayuntamiento y la citada Asociación para el Fomento de la Profesionalidad, Actitudes y Valores.

El edil de Fomento, Juan Marín, aprovechó para anunciar "nuevas herramientas" para los parados "en breve".