Un preso muere tras cortarse las venas con un espejo en el Módulo de Ingreso de Puerto 2
El interno, un polaco que se rajó también el abdomen y el cuello, llevaba sólo 24 horas en la cárcel
Un preso de nacionalidad polaca falleció desangrado al mediodía de ayer en la prisión de Puerto 2, ni 24 horas después de haber ingresado. Al parecer, el interno, Robert M.F., de 32 años de edad, en un arrebato, habría fracturado el espejo de la celda del Módulo de Ingreso en el se hallaba ingresado utilizando un fragmento como arma para autolesionarse. Según distintas fuentes consultadas por este periódico, su intención no era la de autoinfligirse heridas de carácter leve con objeto de llamar la atención, como suele ser habitual en la cárcel, sino la de quitarse la vida. Y es que fue presuntamente el joven el que, utilizando un trozo del espejo fracturado, se rajó en diversas partes del cuerpo: en el abdomen, en el cuello y en las muñecas, llegando a cortarse las venas. La alarma cundió a las dos y media de la tarde cuando cundió la alarma. A pesar de que de inmediato se dio aviso a los servicios médicos de urgencias, acudiendo hasta prisión una UVI móvil, nada se pudo hacer por salvar la vida del joven, que falleció en la misma celda.
La víctima, que tenía su domicilio fijado en Chiclana, había ingresado el día anterior en Puerto 2 por la presunta comisión de un delito contra la salud pública. En España no le constaban antecedentes.
Se ha abierto una investigación para esclarecer las circunstancias de esta extraña muerte en la prisión, al tiempo que se ha ordenado que se practique la autopsia al cadáver. Todo apunta a que se trataría de un suicidio, el segundo en pocos meses , que se suma al de un interno que falleció en la enfermería de Puerto 3, por una ingesta masiva de pastillas.
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