La Guardia Civil está, ahora más que nunca, al servicio de los ciudadanos prestando su colaboración para paliar los efectos de la crisis del coronavirus. Y a veces sus labores van más allá de la vigilancia o la intervención para evitar cualquier tipo de delito. Es el caso de Israel y Mota, dos agentes de Alcalá de los Gazules que acudieron en ayuda de una madre que necesitaba urgentemente un medicamento para su hijo y no podía encontrarlo en su localidad ni dejarle solo para buscarlo. 

El niño, autista de alto grado, necesitaba un medicamento específico para evitar brotes psicóticos y no se encontraban existencias ni en Cádiz ni en Sevilla. En el Colegio de Farmacéuticos le dijeron que existía un envase en una farmacia de Paterna de Rivera, pero nadie podía llevárselo. Desesperada llamó a la Guardia Civil, que no dudó en atender su ruego. 

Los agentes Israel y Mota, como puede verse en el vídeo que acompaña a estas imágenes, se desplazaron a por el medicamento, que además costearon de su bolsillo. Un bonito gesto de ayuda a la ciudadanía por parte de estos efectivos de la Guardia Civil.