La reunión de la Junta Local de Seguridad, celebrada ayer y presidida por la alcaldesa, contó con la presencia de la dirección del área de Fiestas del Ayuntamiento de Puerto Real, los concejales implicados en la organización de la Feria, Policía Local, Policía Nacional, Policía Autonómica, Guardia Civil, Protección Civil y el cuerpo de Bomberos.

Tras analizar sobre los planos el diseño de la Feria y las novedades de la presente edición, la Junta Local de Seguridad ha programado los puntos de auxilio y los turnos y actuaciones de control rutinario durante la Feria. Uno de los principales puntos que se han tratado ha sido el cambio de ubicación de algunas casetas que el pasado año "provocaron un embotellamiento de la calle Guillermo Sasián", y que ha tenido buena acogida por parte de los cuerpos de seguridad. "Vamos a reubicar las casetas más juveniles en el entorno de la antigua portada, al principio del Paseo "Canalejas de Puerto Real", lugar que consideramos más adecuado y de mejor accesibilidad", explicó Manuel Izco, responsable de Fiestas del Ayuntamiento de Puerto Real.

La Junta Local de Seguridad acordó los posibles mecanismos que se pondrían en marcha si hubiese que desalojar alguna zona de la Feria y ha coordinado sus efectivos para atender las necesidades de todo el recinto durante todos los días de celebración. La alcaldesa valoró la reunión como "muy fructífera" y asegurado al término de la misma que "el trabajo está hecho y todos los escenarios posibles tienen preparada su respuesta en caso de que sea necesario".