Los cabecillas del secuestro de Rafael Ávila, en Puerto 3

El estafador Rodríguez de Pueyo y Brey, primo de Rajoy, han sido trasladados a la macro cárcel

Raúl Brey Ábalo.
Rosa Romero / Cádiz

02 de agosto 2008 - 05:01

Los principales cabecillas de la red que perpetró el secuestro del empresario de Sanlúcar Rafael Ávila Tirado, calificado por la Policía como el rapto de móvil económico de mayor duración que ha habido en España, y en el que la víctima ha estado recluida en peores condiciones, se hallan ya en celdas de Puerto 3. Se trata de Luis Miguel Rodríguez Pueyo, conocido estafador que cumplió prisión por el caso Arny (por prostitución de menores en el pub de Sevilla del mismo nombre), y de Raúl Brey Ávalo, primo del líder del Partido Popular Mariano Rajoy, y dueño del chalé en el que Ávila estuvo tirado en un infecto colchón, encadenado a la pared, durante 16 días, la mayor parte del tiempo narcotizado.

Brey fue detenido en el chalé El Retorno, en Almonte, junto al joven José Antonio Giles Rodríguez. Los dos actuaban según la Policía como guardianes de Ávila, liberado el 18 de junio por los Geos tras reventar la puerta del garaje en el que estaba encerrado.

Rodríguez Pueyo, por su parte, fue detenido en un piso de Sevilla junto a Manuel Ibáñez. Estos dos, como destapó este periódico, habían sido demandados por el empresario sanluqueño, al que debían dinero. El estafador, por no haberle terminado de pagarle unos bienes que le compró, una vivienda, un garaje y dos trasteros en la Casa Palacio Las Palomas, una promoción que Rafael Ávila realizó en el centro de Sanlúcar, cerca de la plaza de abastos. El mismo inmueble en el que Ibáñez le alquiló al sanluqueño un local para montar un negocio de venta de baratijas, y dejó de pagarle la renta. La Policía considera que los dos decidieron secuestrar al empresario sanluqueño para vengarse porque los demandó a los dos.

Involucraron a Brey, al otro guardián, y a cinco personas más, dos de ellas, dos sobrinos de Pueyo, los hermanos Miguel y Luis Antonio Rodríguez de Sousa. Este último fue el que fue detenido en Sanlúcar, y enviado a Puerto 2, donde sigue recluido en el Módulo C. A éste se le imputa la financiación del secuestro, y declaró ante el juez que le habían tocado en la Lotería de Navidad de 2006 tres millones de euros. Su hermano y otros tres peones de la red, los hermanos Vanesa y José María Hidalgo Gracía y Francisca Sánchez Arellano, fueron puestos en libertad con cargos.

Mientras el sobrino millonario comparecía ante el Juzgado de Sanlúcar, Pueyo e Ibáñez lo hacían en Sevilla, y Brey y el otro guardián en un juzgado de Huelva. Dado que el caso se lleva en los Juzgados sanluqueños, han sido trasladados a Puerto 3.

No hay comentarios

Ver los Comentarios

También te puede interesar

Historias de Cádiz-Herzegovina | Capítulo 52

Serafín Núñez, el primer gran inocente de la política gaditana

Lo último