Como cada año, el Carnaval roteño se despidió con la salida de la Gran Cabalgata del Humor que concentró a centenares de ciudadanos que se animaron a salir a la calle para poner punto y final a esta fiesta que comenzaba el pasado 2 de febrero con el pregón del corista gaditano Julio Pardo.

El frío y el viento que arreciaban en la tarde de ayer, no fueron excusas para que los más carnavaleros sacaran a la calle por última vez su disfraz. Así, puntualmente, a las cinco de la tarde, partía desde la explanada de Renfe la Gran Cabalgata del Humor presidida por la Sirena del Carnaval 2008, Nazaret Gutiérrez Ramos, junto con sus ninfas y la Sirena Infantil, María Luna Ramos, jóvenes roteñas que dieron colorido al cortejo con sus trajes.

Los roteños demostraron durante el fin de semana su apuesta por mantener esta fiesta que años atrás se vivía con mucha menor participación y que ahora goza de un momento de esplendor en el que los más jóvenes con la creación de nuevas agrupaciones tienen bastante protagonismo junto con los veteranos.

Un papel importante en el cortejo más colorido del año, que también tienen las distintas Ampas de los diferentes colegios de la localidad que incita a padres, madres e hijos, a ir disfrazados con un mismo motivo. Así, se pudo ver en la cabalgata a los ratoncitos del Alarcón, a los Hansel y Gretel de los Salesianos, a los zulus y massais del Lobillo, a las sirenitas y tritones del Calasanz, a las damas y guerreros de la Salesianas, a las brujas de Pozo Nuevo, a los aladinos del Azorín o a los personajes de la película Shrek representados por la Asociación de Disminuidos. Todos ellos, formaron parte del gran cortejo junto a grandes grupos de amigos que en esta ocasión también elaboraron su propia carroza.

Alrededor de cuatro horas de recorrido llenaron las calles de la localidad de papelillos y serpentinas anunciando el fin del Carnaval 2008 que se despidió por la puerta grande.