Viajeros de la línea Cádiz-Ronda se quejan del mal estado de los buses

Las cuatro horas que dura el trayecto en autobús entre Cádiz y Ronda pueden convertirse en un auténtico calvario si se viaja a bordo de un vehículo en malas condiciones, sucio, sin aire acondicionado y que, además, realiza un total de 20 paradas por los pueblos serranos antes de llegar a su destino final. Esto es lo que denuncian los usuarios de la línea de Transportes Generales Comes que cubre el recorrido entre ambas ciudades. Según señalan los usuarios, "cuando no hay ni aire acondicionado, el viaje es insoportable".

Uno de los usuarios que lleva muchos años utilizando esta línea se queja de que los servicios dedicados a la Sierra "siempre son los que peor se tratan". Señala que durante el trayecto de las dos de la tarde del lunes, una mujer embarazada no tuvo más remedio que apearse del vehículo en la tercera parada (Jerez), ya que el autobús en el que viajaban no tenía aire acondicionado y allí "no se podía ni respirar". Por ello, el conductor se vio obligado a cambiar de vehículo para seguir el trayecto.

Desde el comité de empresa de Comes, Antonio Jiménez asegura que el estado de los autobuses de esta línea no es un caso aislado y que "toda la flota se ha quedado obsoleta". Jiménez señala que el autobús "más nuevo tiene seis años" y que la media supera los ocho años: "los autobuses están de pena, tanto por dentro, como por fuera". Afirma que el sindicato lleva ya mucho tiempo quejándose del estado de los autobuses sin que la empresa haga nada para solucionar la situación. También se queja del mal funcionamiento de los servicios de limpieza: "Si alguien vomita, ahí se queda". Por otro lado, lamenta que la situación continúa siendo así porque "los usuarios no se quejan". Prueba de ello es la ausencia de hojas de reclamaciones presentadas por viajeros en las oficinas de la empresa en Cádiz.