El sector almadrabero de la provincia ha mostrado su preocupación por el recorte aplicado por la Unión Europea en la nueva cuota de pesca y, también, por el escaso valor que tendrá este año el kilo de atún.

El Ministerio de Medio Ambiente ha hecho públicas las cuotas establecidas para el sector dedicado a la captura del atún rojo para las flotas del país, de acuerdo a lo aprobado por la Unión Europea el pasado diciembre. La flota comunitaria deberá reducir a 12.406 toneladas sus totales admisibles de captura (TAC), que el año pasado fueron de más de 16.000. En el caso de España, la reducción anual implica pasar de 5.678,5 a 4.116,5 toneladas, más de 1.500 toneladas menos.

Sobre las 4.116,5 toneladas se aplican las diferentes cuotas establecidas. En el caso de las almadrabas será del 26,44 por ciento, lo que supone algo más de 1.000 toneladas para las cuatro almadrabas que trabajan en las costas de la Janda y Tarifa.

Según explicó Marta Crespo, gerente de la Organización de Productores Pesqueros de Almadrabas (OPP 51), "el total admisible de capturas ha bajado drásticamente con respecto a la última Comisión Internacional para la Conservación del Atún Atlántico (ICCAT), ya que "tenían un total admisible de captura de 29.500 toneladas que se ha visto reducido a 22.000, con lo cual repercute directamente en la cuota asignada al sector de la almadraba".

El mayor temor de los trabajadores de las empresas almadraberas es "el poco valor comercial que alcanzará este año el kilo de atún en el mercado, dada la crisis económica existente tanto en España como en otros países como Japón, con el que se mantienen importantes lazos comerciales, al ser su principal comparador y consumidor". Para Crespo, "hay que contar con el factor precio, un elemento que siempre oscila en función del mercado, y este año, con la crisis generalizada, lo vamos a tener difícil para llegar a al umbral de rentabilidad de las almadrabas".