Hace sólo unos días este periódico publicaba que la administración concursal que rige la gestión de la antigua fábrica de Delphi sacaría a subasta los terrenos y las naves si, tras el verano, seguía sin haber ofertas. Pues ayer llegaba la primera oferta formal por Delphi desde que cerró. Y lo hizo desde una administración que, tal vez, no era la esperada.

La Autoridad Portuaria de la Bahía de Cádiz (APBC) anunciaba por sorpresa que está dispuesta a adquirir esos suelos porque los terrenos propios en el Bajo de la Cabezuela ya no dan para más. Y, por si fuera poco, la primera opción del Puerto gaditano, Las Aletas, prácticamente se ha desvanecido tras la segunda sentencia en contra del Tribunal Supremo.

Por tanto, la entidad que preside José Luis Blanco expresó ayer que estudia la posibilidad de adquirir la parcela de Delphi, de 276.419 metros cuadrados, debido a la "escasez de suelo disponible" en La Cabezuela. Según explicó Blanco, esta opción ya se ha planteado a Puertos del Estado. y, en principio, aseguró que se pensó en "el proyecto Las Aletas, pero debido a su dificultad hemos barajado distintas posibilidades", entre ellas de la los terrenos de la antigua Delphi. Además, Blanco destacó que "puede ser un proyecto viable", una vez han analizado "los costes de compra, urbanización y las posibilidades de amortización". En este sentido, la APBC considera estratégico este suelo por su extensión, cercanía y por las futuras conexiones ferroviarias.

Por ello, la propuesta será presentada el próximo martes 27 de junio al consejo de administración del organismo portuario, que deberá analizarla y, en su caso, solicitar a Puertos del Estado autorización para la adquisición de los terrenos. El artículo 44 del texto refundido de la Ley de Puertos del Estado y de la Marina Mercante establece el procedimiento para las enajenaciones de bienes, que se aplica también a las adquisiciones. En este sentido, la normativa requiere la comunicación previa a la Dirección General de Patrimonio del Estado y las condiciones de la misma deben ser autorizadas por Puertos del Estado.

Según ha podido saber este periódico, la APBC ya tiene su propia tasación homologada de lo que le costaría comprar esos terrenos: 2,8 millones de euros. Es más, incluso ha valorado el coste de lo que supondría despejar de chatarra todo el solar y la posterior urbanización: entre 6 y 8 millones de euros.

Esta opción contaría ya con el beneplácito de los empresarios, los sindicatos, la comunidad portuaria e, incluso, Puertos del Estado, que ya conocería la operación desde hace semanas.

A partir de ahora serán los administradores concursales de Delphi los que tengan que tomar una decisión. De momento esperarán hasta el martes, cuando prevén que les llegue la propuesta de la APBC de manera oficial, y la estudiarán. En contra de que sea aceptada está la necesidad de contar con recursos financieros suficientes para pagar a los acreedores. De hecho, la tasación inicial de los terrenos que hizo la Administración concursal rondaba los 14 millones de euros.

Pero, a favor, quizás pese más el hecho de que en casi una década no han existido ofertas de compra y que el paso del tiempo ha devaluado unos terrenos y, sobre todo, unas naves que ya no rendirían económicamente ni tan siquiera como chatarra.

La noticia fue acogida de muy buenas maneras, como era de esperar, por el resto de administraciones. Desde la Junta, su vicepresidente, Manuel Jiménez Barrios, aseguró a este periódico que "es una magnífica noticia" porque "añade terrenos de un interés logístico" a los ya existentes de propiedad pública.

Jiménez Barrios aseguró que este tipo de decisiones "forma parte de la estrategia que venimos gestando desde hace tiempo" y que es favorable realizar, puesto que "hay diez millones de metros productivos en la Bahía de Cádiz, de los cuales ocho millones son públicos y un conjunto de administraciones son las que los gestionan", pero hay que "unificarlos para que tengan cierto atractivo". Con la compra de estos terrenos por la Autoridad Portuaria se añaden "unos terrenos de un interés logístico para crear empleo y riqueza". Asimismo, destacó que "si ahora damos el paso siguiente, que es que Zona Franca, como principal instrumento en materia económica en la provincia, sea capaz de analizar su capacidad incorporando los suelos, tanto estos como otros que tenemos en el saco de la Bahía, estaremos poniendo a disposición de las empresas unos suelos de alto valor estratégico".

Por último, el alcalde de Puerto Real, Antonio Romero (Sí se puede), dijo a este periódico estar muy satisfecho con las pretensiones de la Autoridad Portuaria. El primer edil puertorrealeño aseguró que el presidente de la APBC le había trasladado la idea hace algún tiempo, y consideró que es una buena oportunidad porque "creemos que la pretensión es hacer de esos terrenos una zona polivalente y actualmente los usos del suelo lo permiten". Romero anunció que "se facilitará todo lo posible la instalación de empresas y, si es necesario, los cambios que se requieran en los usos del suelo". No obstante recordó que los usos actuales son "industriales amplios" por lo que se permite en ellos prácticamente cualquier actividad a excepción de la venta directa.