El conflicto sanitario planteado entre Pascual y el SAS mantiene en vilo a poblaciones como las de la Sierra de Cádiz o la de la Costa Noroeste. Los centros sanitarios de Villamartín o Sanlúcar se hallan en el epicentro del enfrentamiento, así como aquellos ciudadanos que, desde hace años, reciben allí asistencia.

De esto alertaron ayer desde Izquierda Unida. Su coordinador provincial en Cádiz, Fernando Macías, mostró su preocupación por la "grave situación" creada en el conflicto, que hasta este lunes "ponía en vilo a la plantilla ante el impago de las nóminas" y "aún no queda garantizada la asistencia sanitaria en zonas como la Sierra", donde la cobertura de Pascual es "la única asistencia sanitaria disponible".

Recuerda Macías que de acuerdo con la información transmitida a IU por los trabajadores, la situación generada es "preocupante" tanto para los empleados de Pascual como para los pacientes, por un lado, "por la incertidumbre de pago de nóminas" y, por otro, porque hospitales como el de Villamartín se enfrentan al "cierre" de instalaciones y cuenta ya con "una importante merma" de camas disponibles.

El coordinador provincial confía en que definitivamente se llegue a un acuerdo tal y como ha apuntado este lunes el consejero de salud, Aquilino Alonso, aunque califica de "gravísima" la situación generada por ambas partes. A su juicio, "los pacientes no pueden ser moneda de cambio ni rehenes en la negociación de nadie; ni los trabajadores pueden dejar de cobrar por un conflicto que parece que se está enconando y del que ellos no tienen ninguna responsabilidad".