La titular del Juzgado de Instrucción número cuatro de los de La Línea -la misma que hace un mes ordenó su búsqueda y captura- decretó ayer el inmediato ingreso en la prisión de Botafuegos de Algeciras del supuesto agresor sexual de una niña de 11 años en la ciudad linense apenas una hora después de que la Royal Police de Gibraltar hubiese hecho efectiva la orden de extradición ordenada por la Corte de Magistrados del Peñón el pasado día 27 de diciembre. El vecino de La Atunara Manuel Sánchez Moreno, conocido popularmente como Marruti, de 59 años de edad, ya se encuentra a buen recaudo en la prisión algecireña de Botafuegos. Su entrega a la Policía Nacional española se produjo pasadas las 12:30 del mediodía en los límites de la frontera y estuvo rodeada de discretas medidas encaminadas a evitar que la imagen del presunto violador de una niña de 11 años pudiese ser divulgada.

El presunto delicuente permanecía en detención preventiva en la prisión de Windmill Hill, después de haber sido detenido el pasado día 23 por la Policía de Gibraltar, la ciudad en la que había tratado de refugiarse una vez tuvo conocimiento de que había sido denunciado. La entrega se había dilatado como consecuencia de un defecto de forma detectado en el procedimiento de extradición en su primera intentona.

Poco después del mediodía de ayer Marruti, discretamente acompañado por dos policías de la Roca, se apeó del vehículo a unos metros de la frontera y fue conducio por un carril al que no tienen acceso los ciudadanos hasta la furgoneta de la Policía Nacional, que se encontraba aparcada a la altura del habitáculo en el que se sitúa el funcionario al que es necesario enseñar la documentación para poder acceder al suelo gibraltareño.

De inmediato, los efectivos policiales lo introdujeron en el vehículo y lo desplazaron hasta la Comisaría, donde se hizo efectiva la orden de la magistrada, que lo puso en manos de la Guardia Civil, responsable de su traslado hasta la prisión de Botafuegos, en la que se encuentra cumpliendo condena el padre de la supuesta agredida.

A principios del pasado mes de diciembre, el supuesto agresor de la pequeña se hizo cargo durante el fin de semana de la hija de un amigo. Marruti llevó a la menor (siempre en espera de que estos datos sean constatados por la juez) hasta un hostal que se encuentra en la desembocadura del río Guadarranque, en el término municipal de San Roque. Fue allí donde supuestamente abusó de la niña, a la que también supuestamente drogó para tener la posibilidad de consumar el acto sin encontrar resistencia. Tras esto, la menor fue localizada en muy mal estado por su familia en una zona próxima a lavivienda familiar, en el barrio de La Atunara, desde donde fue llevada al cercano hospital.

El informe médico emitido por el centro hospitalario linense determinó que la menor había sido víctima de abusos sexuales e incluso se hallaron restos de ADN que coincidían con los del acusado de la violación.

Tras enterarse de que la Policía le buscaba, el hombre se dio a la fuga. La Policía sospechaba que había huido a Marruecos o Gibraltar y por eso el juzgado emitió la orden de búsqueda internacional, como es habitual en la comarca del Campo de Gibraltar siempre que hay riesgo de que el delincuente cambie de país con relativa facilidad.

El detenido es pescador y tiene una embarcación que se encontraba en el puerto de La Atunara, pero después de que la familia de la menor diese a conocer la noticia y difundiera su foto en las redes sociales, la familia de Marruti trasladó la embarcación al puerto de Estepona (Málaga) ante el temor de que familiares y amigos de la víctima tomaran represalias y causaran daños al barco.