Un incendio en un aparcamiento subterráneo de la plaza Aníbal González de Jerez provocó el desalojo preventivo de tres bloques de pisos -más de cien vecinos, calculan las fuerzas de seguridad- y que se calcinaran cuatro vehículos antes del mediodía de ayer. Un coche cuyo motor salió ardiendo antes provocó el suceso.

El propietario del automóvil donde comenzó el fuego, Jesús, explicó posteriormente a este medio que "acaba de arrancarlo para salir a la calle. No pude ni sacarlo porque comenzó a echar humo y lo guardé inmediatamente. Salí como pude del garaje, arrastrándome hasta una puerta, porque hubo una humareda tremenda de pronto. Los bomberos vinieron inmediatamente, pero se entiende que el fuego estaba muy cogido". Este automóvil es un Audi A4 con una antigüedad de doce años. Su dueño agregó que"acababa de hacerle la revisión. Estaba perfecto sin ningún problema. No sé qué ha podido pasar. Por lo menos me queda el consuelo de que no le ha pasado nada a nadie, porque la humareda era tremenda".

Los bomberos tuvieron problemas inicialmente para controlar el fuego. "Han tenido que salir por patas. Había riesgo de que se produjera una deflagración pues hubo un derrame de gasolina ardiendo, que ya saben lo que es de peligroso", indicó la Policía Local. Luego el 085 -que comandó numerosas unidades- pudo controlar el incendio empleando grandes cantidades de espumógeno.

Policías nacionales y locales y otros vecinos avisaron al resto, piso por piso incluso -pues varios hicieron caso omiso de las llamadas realizadas a los telefonillos- para que desalojaran sus edificios de modo preventivo. No hubo que lamentar daños personales, indicó el 061, que desplazó varias ambulancias como medida de prevención para atender a posibles damnificados. El desalojo de los inquilinos se prolongó durante más de una hora, aunque las tareas de ventilación de los inmuebles afectados duraron más tiempo.

Cuatro vehículos quedaron totalmente calcinados por el incendio. Otros han sido dañados por la humareda, aunque parece que será necesario una evaluación más precisa una vez que quede limpia la zona, indicaron fuentes policiales. Ramón fue otro de los vecinos de la plaza Aníbal González más afectados por el suceso: "Es para llorar, aunque ahora estoy más tranquilo. Teníamos aparcados tanto el coche de mi mujer y mi moto cuando ocurrió el fuego. El coche (que era de gasolina) podría tener unos ocho años y la moto unos tres. Ambos han quedado calcinados. Estaban muy cerca de donde salió ardiendo el Audi".

También tuvo auténtica mala suerte una mujer, Yolanda. Explicó que "Los Reyes me habían echado el coche (un Citroën C3) este año. Se ha quemado entero. Calcinado. Y encima lo estaba pagando... Una ruina. Y también el engorro del lunes: ¿cómo llevo los niños al colegio sin coche? Menos mal que no ha pasado nada".

Las fuerzas de seguridad informaron a los afectados de los pasos a seguir para reclamar los daños sufridos inclusive presentando denuncia. Otro de los evacuados, un ciudadano sudamericano, añadió que "nos dijeron que bajásemos porque el humo era muy denso. No sé cuantas personas habrán salido, aquí vive bastante gente, pero se ha bajado toda". Otro vecino, Luis, indicó que "en el garaje pueden caber unos treinta coches. Se han quemado varios y otros han sido dañados. A las diez, más o menos, me llamaron para que saliera a la calle, aunque no sé quien lo hizo; era todo un follón. Pero antes ya había escuchado unos ruidos muy extraños. Quien iba a decir que fuera un incendio tan gordo". Varias tiendas enclavadas bajo los edificios desalojados cerraron por el fuego hasta que llegó la calma.