Los delegados sindicales de las empresas que Nueva Rumasa tenía en jerez se reunieron ayer por la mañana en el edificio sindical de la plaza del Arenal para analizar la situación a la que les ha conducido la presentación de una serie de expedientes de regulación de empleo en el seno de la compañía por parte de su nueva propietaria, Back in Business, propiedad del controvertido empresario Ángel de Cabo.

Según destacó a este medio José Páez, secretario del Sindicato Agroalimentario de CCOO, "la reunión se ha desarrollado con normalidad y hemos determinado, entre otros asuntos, preguntarle a la empresa por los criterios que ha seguido para elegir a los trabajadores que van a ser expedientados en estos ERE". Como se recordará, los administradores concursales ya ha presentado tanto en el Complejo Bellavista como en Bodegas Valdivia las listas de los trabajadores afectados. Una de las grandes sorpresas de los sindicatos radica en que, una vez analizadas las listas "resulta que en las mismas hay personas con sueldos muy altos a los que ni siquiera se les toca mientras hay decenas de trabajadores con sueldos mucho más escuetos a los que se echa a la calle". Este y otros asuntos formarán parte de la batería de preguntas y medidas que los sindicatos opondrán a las regulaciones de empleo en las bodegas de Nueva Rumasa en Jerez.

"Desde el Sindicato Agroalimentario -explicó José Páez- insistimos en que las listas no son definitivas. Hay que negociar el número de afectados y es evidente que habrá que reducir la cifra". En la actualidad, las pretensiones de Back in Business pasan por eliminar un total de 86 puestos de trabajo de cuatro centros de empleo, que son el Complejo Bellavista, Bodegas Valdivia, Teresa Rivero y Zoilo Ruiz-Mateos. A todos estos se suma un colectivo especialmente afectado pero no reflejado en ningún lugar, como son los temporeros que trabajaban para Zoilo Ruiz-Mateos y que alcanzan la nada desdeñable cifra de 86 trabajadores, es decir, tantos como los que los nuevos propietarios desean regularizar.

Por el momento, las movilizaciones a modo particular van a quedar aparcadas ya que "todo cuanto queramos decir o reivindicar se puede incluir en el seno de las protestas que se están llevando a cabo en la actualidad de forma general. Así se lo hemos transmitido: que se unan a las movilizaciones generales de los sindicatos", concluyó el secretario del Sindicato Agroalimentario.