El sindicato Comisiones Obreras ha elaborado un informe para evaluar el impacto de la entrada en vigor de la Ley de la Reforma Laboral que señala que, desde su aprobación, se han perdido 52.000 empleos en la provincia de Cádiz y se han alcanzado cifras récord de destrucción de trabajo indefinido. 

En la elaboración del estudio, según indica CCOO en un comunicado, se han utilizado hasta 15 indicadores, siempre con datos públicos del INE, y ninguno arroja resultado positivo. 

La secretaria de Empleo de CCOO-A, Nuria López, ha asegurado durante la presentación de este trabajo en Cádiz que se está produciendo "una mutación del empleo", que se ha precarizado, de modo que, aunque puede haber "signos" no se puede hablar de recuperación "en tanto no llegue a las familias y a los centros de trabajo". 

López ha recalcado que los objetivos con los que el Gobierno presentó esta modificación de la normativa -favorecer la creación de empleo y la estabilidad y acabar con la flexibilidad externa en favor de la interna- "han fracasado rotundamente". 

Frente a ello, según ha criticado, se ha generado "una desregulación total del mercado de trabajo" y una "arbitrariedad total a favor de las empresas", de ahí que desde CCOO se haya reclamado la derogación de esta norma "inútil, injusta e ineficaz" y la negociación de una nueva con la implicación de los agentes sociales y económicos. 

La provincia de Cádiz ha perdido, desde 2012, 18.700 empleos femeninos y 24.000 puestos de trabajo en el sector público, un área que en años anteriores había crecido hasta alcanzar un techo, en 2011, de 96.346 ocupados. 

La población parada aumentó en mayor medida que en 2011, cuando se registró una tasa de desempleo del 32,5 % sumando diez puntos porcentuales para situarse en el 42,3 %. 

También aumenta el paro de larga duración y en Cádiz se ha pasado de 57.300 personas (un 31,6 %) con más de dos años en desempleo en 2011, a 128.200 (53,4% ) en 2014. 

La contratación indefinida ha tocado fondo en 2013 (un 3,5 frente al 4,1 % de 2011) y la jornada completa está siendo sustituida por la parcial: en 2011 el porcentaje de trabajadores con jornada parcial era del 16,3% y en 2014, del 22,4%, algo que afecta especialmente a las mujeres, que han pasado del 27,3 al 38,2%. 

Con respecto a las retribuciones, hay casi 159.000 parados sin prestaciones, el 64 %, frente al 45 % de 2011, los salarios se han reducido un 4,8 % en dos años y se ha pasado del 40,9 % al 44,5 % de 2013 de los llamados "trabajadores pobres", es decir, que tienen salarios anuales inferiores al Sueldo Mínimo Interprofesional.