Arcos pide más ayuda para evitar el desalojo de unas 200 familias
Las obras de consolidación de la ladera de la Verbena, que están a punto de concluir, necesitan más dinero para frenar los corrimientos · El Consistorio trasladará el problema hasta la Unión Europea
El Ayuntamiento de Arcos calcula que más de 200 familias podrían ser desalojadas de sus casas este próximo invierno si se paralizan las obras de estabilización de la ladera que las sostiene, en la zona de la Verbena. Por eso la institución municipal reclama la atención urgente de todas las administraciones superiores para buscar financiación económica para proseguir con el proyecto de consolidación que frene las grietas y los socavones en los cinco bloques afectados en esa zona por los deslizamientos de tierra y en el que viven más de dos centenares de familias del pueblo.
El problema radica en que la ladera de la Verbena es objeto, desde principios de este año, de una serie de trabajos para fijar el terreno y frenar los deslizamientos, cuya primera fase ha contado con un presupuesto de 900 mil euros financiados por el Gobierno central. Pero ese dinero ya casi está agotado y la intervención no ha terminado. El presupuesto ha servido para extraer el agua subterránea acumulada en los terrenos, de composición arcillosa, y, de momento, los operarios están con tareas de inyección de lechada para contener la zona.
El estudio geotécnico elaborado por la dirección facultativa de estas obras, dirigidas por el arquitecto Emilio Yanes, recoge una segunda fase, de 1,9 millones de euros, para garantizar esos terrenos. Sin embargo, no hay oficialmente y a día de hoy, consignación para ello. Así que los vecinos afectados piden la ayuda porque si vienen las próximas lluvias temen que sean desalojados de sus viviendas y aumente el deterioro que vienen sufriendo. De hecho, la actuación presupuestada en la Verbena termina en octubre.
"La dirección facultativa nos dice que las obras no se pueden parar ya que no serviría de nada lo hecho hasta ahora si vienen las lluvias", dijo ayer el delegado municipal de Urbanismo de la localidad, Manuel Erdozain (AI- Pro), quien expresó la preocupación de la nueva Corporación Municipal por este asunto.
"Falta un mes para concluir las obras. Al Ayuntamiento no ha llegado ni un céntimo ni una comunicación oficial sobre financiación. Y lo peor es que, a instancias de la dirección facultativa, calculamos que podrían ser desalojadas más de 200 familias este invierno si no se terminan las obras", añadió Erdozain.
De momento, 22 familias llevan desde 2009 fuera de sus casas ruinosas en la Verbena. Los vecinos están inmersos en una batalla judicial para que se determine la responsabilidad de la constructora que levantó sus pisos.
El Ayuntamiento arcense ha tocado ya a todas las puertas para buscar apoyo a este grave problema. También en septiembre lo elevará hasta la Unión Europea después del compromiso que ha tenido del parlamentario popular, Jaime Mayor Oreja, que trasladará el asunto a esta institución.
Y es que los deslizamientos y las grietas en Arcos no se circunscriben sólo a la ladera de la Verbena. Otras zonas del pueblo están afectadas. "Es un problema serio que afecta a diferentes áreas que van desde la Plaza de España hasta el Retiro", anota el responsable de Urbanismo en el municipio.
Cabe recordar que a los vecinos de la Verbena se unen, también, afectados de las promociones denominadas Pueblos Blancos, cuyas casas presentan numerosos desperfectos y grietas, pese a que son de nueva construcción y tuvieron bonificaciones por ser de protección oficial. El Ayuntamiento reclama los avales de esta urbanización para arreglar, además, los espacios públicos.
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