Apoyo al contrato de Navantia con Arabia a pesar de las dudas sobre derechos humanos
La Diputación tiró ayer de pragmatismo y, tal vez con la nariz tapada en algunos casos o simplemente con la consabida muletilla del "hoy no toca", solicitó a la SEPI y a Navantia, que se agilicen las negociaciones para que se confirme el acuerdo con Arabia Saudí para la construcción de cinco corbetas que supondrá una importante carga de trabajo para los astilleros de San Fernando.
De hecho, la única abstención fue la de la diputada de Ganemos Jerez, quien expuso sus discrepancias por "los crímenes de guerra cometidos por el régimen saudí contra Yemen", aunque no se opuso a la propuesta porque "no hay alternativa mediante un plan de empleo a los 10.000 de puestos de trabajo que se van a crear en la zona". El alcalde de Cádiz, José María González, expuso para su respaldo que "los astilleros no tienen la culpa de lo que los gobiernos hagan con esos barcos", aunque sí propuso que "se tomen medidas para la construcción de barcos civiles". Por cierto que Kichi perdió los nervios cuando José Loiaza le pidió "sacar a Navantia del debate político" y le espetó un sonoro "¡eso es falso!". Tampoco salió adelante la propuesta del primer edil gaditano de crear un Plan Estratégico ya que según José María Román (PSOE), "ya se debatió el mes pasado".
Éste emplazó a "debatir de terrorismo, pero cuando toque, no en este momento; de lo que se trata ahora es de carga de trabajo para Navantia. Todo ello a pesar de que el regidor gaditano mostró su temor de que "después de esos cinco años el silencio vuelva a astilleros".
El encargo de el gobierno de Zapatero de varios barcos para Venezuela, planeó como arma arrojadiza "de la que nadie dijo nada en su momento, según Loiaza, quien expuso también que "lo que se trata es de trabajar para que no se cierre ningún centro de trabajo en la provincia de Cádiz y apostar decididamente por el empleo".
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