Desde 2007 Estrella Figueroa y Josu González de Zárate han viajado con sus dos hijos a Irlanda, Suecia, Canadá, Francia, Reino Unido, Italia, Holanda y este año lo harán a Alemania. Hasta aquí nada extraordinario si no fuera porque este matrimonio lo hace a través del método de intercambio de casas.

La empresa HomeExchange, o IntercambioCasas en España, es la mayor red mundial que gestiona este sistema a través de Internet y esta semana ha estado en Cádiz celebrando su encuentro anual y su décimo aniversario en nuestro país. Violeta Díaz, representante en España, cuenta que han elegido Cádiz porque "queríamos hacer algo en Andalucía y nos gustó mucho este sitio por la proximidad de la playa, la gente, el ambiente... Además aquí hay muchos socios. Ha sido una elección súper acertada".

Y es que nuestra provincia se sitúa la tercera a nivel andaluz (tras Málaga y Sevilla) en número de casas registradas en la web para intercambios. En concreto, existen 95 alojamientos disponibles. A nivel nacional hay más de 4.300 viviendas, de las cuales 585 pertenecen a Andalucía. "Los datos demuestran que España es el segundo país europeo en cuanto a volumen de alojamientos para intercambios de casas y es el segundo o tercer destino preferido", explica Violeta.

Esta cifra no deja de crecer -apunta la delegada de IntercambioCasas- ya que "cada año se suma un 15% más de socios". Para formar parte de este movimiento solo hace falta disponer de una vivienda (puede ser la habitual o segunda residencia) y pagar 130 euros al año. La empresa pone a disposición de los clientes a través de la web un amplio catálogo de las opciones disponibles en todo el mundo, y son los usuarios quienes se ponen de acuerdo entre sí para ajustar fechas e intercambiarse las casas. "Supone un ahorro del 58% con respecto a una experiencia turística habitual, porque además de ahorrarte el alojamiento, puedes programar el viaje con mucha antelación y buscar buenos precios para los vuelos".

Por esos 130 euros los socios pueden realizar todos los intercambios que quieran durante un año. "Normalmente la gente viaja en verano, pero ya están empezando a hacerlo también en Navidad o Semana Santa", señala Violeta.

Estrella y Josu suelen trasladarse durante las vacaciones estivales al extranjero, donde pasan dos o tres semanas, dependiendo del destino. Para ellos no es un impedimento dejar su casa a unos desconocidos, ya que como afirma Violeta, "hay confianza y respeto entre los miembros de esta red. Suelen conocerse antes por Skype o en persona para darse las llaves y no hay problemas".

Tal es la confianza, que cuenta Josu que cuando estuvieron en Canadá "nos alojamos en una mansión y nos dejaron un barco para que navegáramos por el lago que había frente a la casa". En otra ocasión, una socia "nos dejó el coche que se acababa de comprar".

Ellos utilizaron por primera vez los servicios de Intercambio Casas en Peruggia, Italia, y quedaron encantados con la experiencia. "Es una forma agradable y cómoda de viajar porque te sientes como en casa", sostiene Estrella. Para conseguir esto, los propietarios dejan en sus viviendas recomendaciones a los visitantes sobre dónde comer, a qué sitios turísticos acudir, cómo moverse o incluso quedan para cenar o comer antes de desplazarse a uno de los destinos, por lo que se crea un vínculo entre ellos.

"A nosotros nos encanta viajar y nos parece que esta es la manera ideal de hacerlo", concluye Estrella.