El ministro de Asuntos Exteriores y Cooperación, José Manuel García-Margallo, aseguró ayer que ni Francia ha pedido "nada" ni España ha ofrecido "nada" en materia de colaboración en la lucha contra el Estado Islámico. Así, anunció que cuando el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, tome una decisión sobre cómo colaborar con el país galo se hará pública, pero que primero cabe "analizar todos los escenarios y todas las posibles soluciones".

"Lo primero que tenemos que saber es qué tenemos que hacer en Siria y en Iraq, la coalición como tal, y saber cuáles son las necesidades que la coalición tiene y qué es lo que cada país aporta", argumentó García-Margallo para después añadir que la situación se encuentra en "una fase absolutamente embrionaria".

El ministro de Exteriores consideró que "la obligación es simplemente analizar los distintos escenarios y las posibles alternativas" y reiteró que se estudia "cómo colaborar más" en servicios de información, en atajar la financiación que "es la fuente del problema" o en cómo "controlar a los llamados luchadores extranjeros que van y vienen". Por ello, considera que se deben "detectar las necesidades" e intentar que "el presidente, una vez que ha detectado las necesidades, decida cuál es la alternativa por la que se inclina y colaborar e informar al resto de los partidos políticos".

Por su parte, el portavoz del PSOE en el Congreso, Antonio Hernando, aseguró que su partido está abierto a estudiar posibles soluciones siempre que estén avaladas por la legalidad internacional y las Cortes. Lo que sí descartó es que esa solución pase por el envío de tropas sobre el terreno.

Hernando ha subrayado que el los socialistas "están dando muestra de absoluta responsabilidad y rigor a la hora de afrontar un problema de tal magnitud como es el combate contra el terrorismo", en virtud del pacto contra el yihadismo firmado el pasado mes de febrero con el Gobierno de Mariano Rajoy.

El secretario general de Podemos, Pablo Iglesias, fue más duro y pidió no jugar con la vida de los militares ni "hablar a la ligera" sobre una intervención de las tropas en Oriente Próximo cuando podemos tener una situación en la que "vuelvan en cajas de madera soldados españoles".

"Con la vida de los soldados españoles no se juega", espetó Iglesias, para después afirmar que si Francia pide a España ayuda para una intervención militar en Siria la vía más adecuada es que se pronuncie el Parlamento y "a lo mejor hacer un referéndum para preguntarle a los ciudadanos españoles".

El líder de Ciudadanos, Albert Rivera, respondió a Pablo Iglesias que el terrorismo yihadista no se combate con "tuits, ni con hashtags". Rivera aprovechó para criticar que después de tres días desde que su formación envió una carta a Rajoy y otra a Sánchez para poder firmar el referido pacto contra el terrorismo aún no han recibido respuesta.

Sobre si España debe sumarse a la coalición que propone Francia, Rivera volvió a recordar que el Gobierno no debe jugar con la "táctica electoral" a la hora de tomar decisiones para hacer frente al terrorismo yihadista porque los terroristas no están pensando en la "agenda" de España.

Desde el Gobierno, la vicepresidente Soraya Sáenz de Santamaría abogó por una respuesta coordinada y prudente contra el EI, tanto en el ámbito nacional como internacional; mientras que el ministro de Sanidad, Alfonso Alonso, insistió en la versión de García-Margallo de que España no ha recibido ninguna petición para participar en los bombardeos en Siria y que tampoco se ha ofrecido a ello. Alonso recordó que España ha "acompañado a los franceses en su defensa de las libertadas en distintos lugares" como Iraq y Turquía.

Por otra parte, la Policía Nacional detuvo ayer a un preso por captación y adoctrinamiento de yihadistas. A. Chiakhi, que se encontraba preso en la cárcel de Segovia, es un hombre de origen marroquí, de 42 años, y está acusado del reclutamiento de internos para convertirlos en radicales y de amenazar en nombre del Estado Islámico con poner bombas en Madrid y Barcelona.

El ministro de Interior, Jorge Fernández Díaz, celebró la "eficacia" del Plan de lucha contra la radicalización violenta, con la detención del preso "fuertemente radicalizado".

Se trata del primer detenido en España relacionado con actividades de terrorismo yihadista tras los atentados de París. Fernández Díaz, admitió que en España hay "riesgo elevado" de atentado, ante lo que las fuerzas de seguridad están "mejor preparadas que nunca", pese a recordar que "la seguridad absoluta y el riesgo cero no existen".

El secretario de Estado de Seguridad, Francisco Martínez, hizo un llamamiento a la tranquilidad "responsable", que no "ingenua", de los ciudadanos ante la amenaza yihadista.