Las atracciones son una parte fundamental de toda feria que se precie, y como no puede ser menos, la Velada y Fiestas de La Línea cuenta cada año con una amplia oferta tanto para disparar la adrenalina como para que los pequeños se lo pasen a lo grande.

El fin de semana se acerca y cada vez más niños van junto a sus padres al recinto ferial a divertirse y vivir una noche mágica, repleta de luz y movimiento, subidos en las atracciones dedicadas a los más pequeños.

El Tren de la Bruja, los tiovivos y los coches de choque son los preferidos por la chiquillería, además de las atracciones con agua, que tienen muy buena acogida en las ferias de los meses de verano. Una de estas atracciones es el Club Naútico, en la que niños menores de cinco años se pueden dar un paseo en barquita sin peligro de mojarse o caer al pequeño lago por el que circulan.

Sandra Rodríguez es una linense madre de dos hijos, uno de cuatro años y otro de un año, y decidió montar a sus niños en el Club Naútico, ya que a pesar de que el mayor prefería el castillo inflable, Sandra cree que no tiene todavía edad para este tipo de atracciones.

Sin embargo, Clara Mateos y Francisco Pérez, una pareja del municipio, comentaron a este diario que siempre que acuden al recinto ferial montan a su hija Esther de siete años en el castillo inflable. "Desde chica es la atracción que más le gusta, e incluso en su cumpleaños tuvimos que alquilar uno" señaló la madre de esta pequeña.

Además de la montaña rusa o El Canguro, ya tradicionales en todas las ferias, hay atracciones novedosas que ofrecen otro tipo de diversión más allá del vértigo y la velocidad. Stun Láser es una atracción para que jóvenes y niños mayores de diez años demuestren sus habilidades físicas y su puntería.

José Benito Gómez es el propietario de esta atracción láser, que lleva ya ocho años en la Feria de La Línea y da como premio al ganador una gorra de recuerdo. José manifiesta que a pesar de la crisis su atracción se sale un poco de lo habitual y por eso los clientes siguen entrando para divertirse en ella.

Además de los tiovivos y demás establecimientos diseñados para los más pequeños, también hay atracciones para que los jóvenes se diviertan y experimenten un subidón de adrenalina, como son el Top Gun o el tradicional Barco Vikingo.

Los más atrevidos se animan a subir a las una de las atracciones más espectaculares de la Feria, El Martillo, una estructura que se eleva más de una veintena de metros para luego bajar a una velocidad y una altitud muy considerables.

La diversión está asegurada un año más en la Velada y Fiestas de La Línea, donde tanto grandes como pequeños pueden disfrutar de las atracciones repletas de luces de colores y en las que siempre suenan músicas animadas para atraer a los clientes a subir en ellas y pasar una noche emocionante.