La vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, ha afirmado que la responsabilidad y el deber del Gobierno es proteger y garantizar la seguridad de los españoles y de los que vienen a vivir entre nosotros, es decir, los refugiados que huyen del terrorismo. Lo ha declarado en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros al ser preguntada por las declaraciones del vicesecretario general del PP, Javier Maroto, que ha alertado de que entre los sirios que están accediendo a Europa como refugiados "hay muchos yihadistas".

"Las personas que salen de Siria y de estos países huyen precisamente del terror y huyen del terrorismo, y nuestra obligación como Estado es proteger la seguridad de los españoles y de los que vienen a vivir entre nosotros, precisamente estos refugiados", ha señalado. Ha recalcado que "la primera obligación de los Estados" es garantizar la seguridad de los nacionales y los refugiados, así como procurar "el respeto" hacia esas personas que "conocen perfectamente lo que es el terrorismo y huyen de él". Además, la vicepresidenta ha anunciado que el Ejecutivo está trabajando en un protocolo de transporte que permita "ordenar las llegadas" del cupo de refugiados que ha aceptado España.

Ha reconocido que aún se desconocen las fechas o en qué número se va a ir trayendo a los refugiados acordados con la UE (en total 17.680) y se ha remitido a las reuniones que se están teniendo en la Comisión Europea como las próximas de embajadores y ministro del Interior. La vicepresidenta ha asegurado que el reparto de refugiados por comunidades autónomas no será "obligatorio" sino voluntario. Es muy importante, según Sáenz de Santamaría, conocer los perfiles de las personas que llegarán a España para ir diseñando su integración.

La vicepresidenta ha destacado y agradecido asimismo la solidaridad de las administraciones públicas, Acnur y ONG y de la sociedad española en general con sus ofrecimientos para colaborar y ayudar en la acogida e integración de los refugiados. "España ha demostrado que es solidaria y ahora toca demostrar solvencia y eficacia en la gestión de esta crisis humanitaria", ha apuntado. Por ello, ha hecho mención a que, a la espera de que Bruselas determine "cuanto antes" el procedimiento para los traslados, España está adecuando sus estructuras para ese momento. Así, desde el punto de vista de personal, se van a reforzar las oficinas de Empleo e Interior y, siendo conscientes de que el sistema de acogida en España está "muy asentado", se va a trabajar en "preservar" su calidad.

Se ha referido también a la partida de 13 millones de euros entre 2015 y 2016 (6,5 millones cada año) que ha aprobado el Gobierno, destinados a Cruz Roja Española, la Comisión Española de Ayuda al Refugiado (CEAR) y la Asociación Comisión Católica Española de Migración (ACCEM), que servirán para financiar la acogida y la integración de los refugiados. Cruz Roja recibirá 4,6 millones, CEAR 4,2 millones y ACCEM 4,1 millones, con lo que se podrán reforzar los recursos destinados a la acogida e integración de solicitantes y beneficiarios de protección internacional e incrementar el número de plazas de acogida. Las actuaciones que se financiarán son de tres tipos: acogida e integración de las personas solicitantes y beneficiarias de protección internacional en España, el equipamiento y la adaptación de inmuebles y la asistencia sociosanitaria en los Centros de Estancia Temporal de Inmigrantes de Ceuta y Melilla.