El PP sigue siendo la primera fuerza política con un 29,1 por ciento, según el CIS, e incluso aumenta su ventaja con el PSOE hasta los 3,8 puntos, si bien los socialistas también mejoran su estimación de voto por delante de Ciudadanos, que ya es el tercer partido y supera a Podemos, que acelera su caída. Con estos datos, la encuesta del Centro de Investigaciones Sociológicas del mes de octubre ha dado un respiro a los dos grandes partidos que mantienen un claro liderazgo sobre las fuerzas emergentes, a un mes y medio de las elecciones generales del 20 de diciembre.

El sondeo, cuyo trabajo de campo se desarrolló entre el 1 y el 12 de octubre pasados, pocos días después de las elecciones catalanas, refleja que el PP subiría nueve décimas con respecto al anterior barómetro con voto del pasado mes de julio. Los socialistas también incrementan su estimación de voto hasta el 25,3 por ciento -cuatro décimas más que en julio-, mientras que Ciudadanos se sitúa ya como tercera fuerza política con un 14,7 por ciento, subiendo 3,6 puntos en tres meses. Podemos acelera su caída y pasa del 15,7 por ciento de julio al 10,8 de octubre, cuando a primeros de año llegó a alcanzar el 23,9 por ciento según el CIS, incluso por delante del PSOE.

No obstante y como es habitual en las últimas encuestas, los socialistas superan en más de un punto al PP en apoyo directo -sin la interpretación demoscópica-, ya que el sondeo de octubre otorga al PSOE un 16,6 por ciento frente al 15 por ciento de los populares. Volviendo a la estimación de voto, IU sigue su senda ascendente, sube un punto y se quedaría con el 4,7 por ciento y UPyD perdería algo de apoyo y se quedaría en el 1,2 por ciento.

Convergencia Democrática de Catalunya (CDC) -sin Unió- bajaría cuatro décimas hasta el 2,9 por ciento, mientras que el partido de Josep Antoni Duran Lleida se queda con un testimonial 0,1 por ciento. Del resto de partidos, ERC prácticamente repetiría sus resultados de julio con un 2,2 por ciento; al igual que Amaiur, que sube una décima hasta el 1,2. Por contra, el PNV sufriría un retroceso al pasar del 1,3 al 0,7 por ciento, siendo superado por Compromís-Equo que suma dos décimas hasta el 1,4.

Pese al protagonismo político de Podemos y Ciudadanos, el CIS no pregunta a los españoles su opinión sobre Pablo Iglesias y Albert Rivera, ya que todavía no tienen escaño en el Congreso. Al margen de estos líderes políticos, los ciudadanos siguen suspendiendo a todos sin excepción. La única que se acerca al aprobado es Uxue Barkos, actual presidenta de Navarra, con un 4,2, que se despidió en mayo de la política nacional. El secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, con una nota de 3,84, saca una clara ventaja al presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, que aunque ha subido dos décimas, se queda en un discreto 2,82 sobre diez, siendo uno de los peor valorados.

Ninguno de los ministros aprueba, el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, como peor valorado. La que consigue mejor nota es la vicepresidenta, Soraya Sáenz de Santamaría, que mejora su calificación hasta un 3,60 y desbanca al ministro que en el último barómetro estaba en primer lugar, el titular de Exteriores, José Manuel García-Margallo, que en este sondeo obtiene un 3,52. En tercer lugar les siguen con la misma nota -3,21- los ministros de Sanidad, Alfonso Alonso, y Fomento, Ana Pastor, mientras que el cuarto puesto lo ocupa la titular de Agricultura, Isabel García Tejerina (2,99). Luis de Guindos, ministro de Economía, se sitúa en quinto puesto con 2,96, seguido del titular de Interior, Jorge Fernández Díaz, con 2,85, la ministra de Empleo, Fátima Báñez (2,65), el titular de Defensa, Pedro Morenés (2,64) y el de Justicia, Rafael Catalá (2,61). En los últimos puestos se sitúan el ministro de Industria, José Manuel Soria (2,53), el titular de Educación, Iñigo Méndez de Vigo (2,52) y Cristóbal Montoro, quien con una nota de 2,28 cierra esta lista.

La fecha en que fue realizada la encuesta -poco después de las catalanas- ha condicionado la opinión de los españoles sobre los principales problemas de España. Aunque el paro sigue siendo la mayor preocupación, citada por un 79,1 por ciento, seguida de la corrupción, con el 39,4, la inquietud por los nacionalismos se ha duplicado en un mes. Así, se sitúa en los diez primeros puestos de la lista, con un 4,2 por ciento, cifra que no se daba desde 2006 en pleno debate sobre el Estatuto de Cataluña. Detrás del paro y la corrupción, que se mantiene en niveles similares al anterior barómetro, en el tercer puesto de la lista se sitúan los "problemas de índole económica" con un 24,7 por ciento por delante de los "políticos y los partidos" con un 21,5; la sanidad (10,6), los "problemas de índole social" (10,1) y la educación, con un 8,7 por ciento.

Reflejo de la preocupación que el paro tiene en los españoles, es que el 64,6 por ciento sigue pensando que la actual situación económica es "mala" o "muy mala", prácticamente igual que hace un mes. Tampoco son muy optimistas respecto al futuro de la economía, ya que sólo un 26,6 por ciento presagia que irá a mejor, frente al 42,4 que dice que estará igual y el 14 que cree que empeorará.

De igual modo tampoco hay grandes variaciones en la opinión sobre la situación política y una gran mayoría, el 70,4 por ciento, la califica como "mala" o "muy mala", un 23 por ciento como regular, y sólo un 3,6 opina que es "buena" o "muy buena". No son tampoco optimistas mirando al futuro, porque a un año vista la impresión mayoritaria es que la situación política estará igual -40,2-, un 20,4 por ciento vaticina que estará mejor, pero el 16,9 piensa que irá a peor.