El ministro de Asuntos Exteriores y Cooperación, Miguel Ángel Moratinos, se felicitó ayer de la intención de la Liga Árabe de crear una "política de vecindad", como la que tiene la Unión Europea hacia sus vecinos del sur y del este, con el fin de facilitar las relaciones con los países vecinos y confió en que España pueda ser "un interlocutor privilegiado" en ella.

Según informó Exteriores en un comunicado, Moratinos tuvo conocimiento de esta propuesta del secretario general de la Liga Árabe, Amr Musa, en un reciente encuentro con él, quien le explicó que el objetivo es establecer una "política árabe de vecindad" que sirva de cauce para la cooperación y el diálogo con los países que conforman las "fronteras exteriores" de los 22 Estados miembros.

El jefe de la diplomacia expresó su satisfacción por el hecho de que la propuesta "haya sido aceptada por la Cumbre Árabe celebrada en Sirte a finales de marzo pasado" y dijo esperar "con el mayor interés la elaboración del documento en el que el secretario general plasmará esa idea".

Asimismo manifestó su apoyo a esta "importante iniciativa" y confió en que "España, por su cercanía geográfica, histórica, cultural y política con el mundo árabe y con los países de la Liga, pueda tener cabida en ese proyecto como interlocutor privilegiado".

El ministro recibió ayer en Washington el premio Jan Karski del Comité Judío Estadounidense por su lucha contra el anti-semitismo. El evento contó también con la presencia de la secretaria de Estado estadounidense, Hillary Clinton, el ministro de Defensa israelí, Ehud Barak, y el ministro de Asuntos Exteriores holandés, Maxime Verhagen.