La alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, recibió ayer a las esposas de los políticos independentistas en prisión preventiva por el proceso soberanista, en un encuentro en el que se apeló a la defensa de los derechos humanos y la solidaridad y se criticó la ausencia del PSC. "Este acto no va de independencia, va de derechos y libertades", subrayó Colau, quien cree que "están siendo recortados y pisoteados", lo que a su juicio afecta a "todos y cada uno de los ciudadanos catalanes y a todos y cada uno de los españoles". El acto de apoyo a las familias de Joaquim Forn, Oriol Junqueras, Jordi Cuixart y Jordi Sánchez reunió en el Ayuntamiento de la capital catalana a representantes de entidades sociales, culturales y sindicales, y de los grupos políticos que reclaman su puesta en libertad o su traslado a cárceles de la comunidad.