David Gómez-pastrana. Neumólogo pediátrico

"No hay dudas sobre la importancia de las vacunas"

"No hay dudas sobre la importancia de las vacunas"

"No hay dudas sobre la importancia de las vacunas"

-¿Hay más niños alérgicos que hace 50 años o es sólo una sensación?

-Parece que sí, que hay un aumento. Se estima que el 25% de la población lo es. Dentro de las causas que se han estudiado, hay varias: aumento de la higiene, estar correctamente vacunados, el hecho de que se practiquen cesáreas... Eso hace que el sistema inmunológico pase a defenderse de sustancias que son aparentemente inocuas, como los ácaros o el polen. Se esgrime también la contaminación, que hace que los pólenes sean más alergizantes.

-¿Y cómo podemos ponerle solución?

-La prevención es clave. Podemos empezar por no renunciar a la lactancia materna, que aporta muchos agentes infecciosos que previenen la alergia. Evitar también el abuso de antibióticos y vivir lo más sano posible dentro de lo que cabe. Y debemos tener una alimentación sana en todas las etapas de la vida pero especialmente en los primeros años, eliminando sustancias aditivas y en general todos los alimentos que lleven conservantes, saborizantes, que son algunos potencialmente causa de alergia.

-La alimentación es uno de los grandes frentes abiertos.

-La OMS alerta de que la obesidad es el gran problema de salud del siglo XXI, y España está a la cabeza, desgraciadamente, en obesidad infantil. A la larga, esto tiene consecuencias muy negativas para nuestra población, con riesgo de hipertensión, colesterol...

-Entre tantas horas de estudio, clases de música, de inglés... ¿Se está dejando de lado la importancia del deporte entre los niños?

-Los efectos del ejercicio son innumerables: mejora la musculación, la condición física, la osificación, el control de la diabetes, colesterol... Y disminuye la probabilidad de sobrepeso y obesidad. En Finlandia, que está a la cabeza en educación infantil, recomiendan tres horas diarias de ejercicio en el colegio. La recomendación habitual es una hora de ejercicio programado y otra de ejercicio libre. Nuestros niños pasan muchas horas frente a pantallas, eso favorece el sedentarismo.

-Volviendo al asunto de las vacunas, que sí favorecen la alergia. ¿Su efecto es siempre positivo?

-No hay dudas en la comunidad científica sobre la importancia de la vacunación. Algunas enfermedades que se vacunan eran la principal causa de muerte infantil hasta hace no tanto. A cambio, es cierto, está provocando el aumento de la sensibilización alérgica, pero es un precio que merece la pena pagar.

-¿Las grandes ciudades generan niños que respiran peor?

-El efecto invernadero que genera la polución y esas boinas de humo favorecen la alergia al polen. Los niños que nacen en granjas están expuestos a más gérmenes y paradójicamente eso es bueno para su salud respiratoria, tienen menos probabilidad de sufrir alergia y asma. Pero por otro lado están las ventajas de vivir en la ciudad, con más comodidades. Yo siempre recomiendo a los padres que con sentido común vean en la medida de sus posibilidad qué pueden hacer.

-Las guarderías son también un foco de infección.

-Los niños están más expuestos, pero depende de la predisposición del niño. Hay niños que cada vez que se acatarran acaban ingresados. Las principales causas de hospitalización son la bronquiolitis, provocada por un virus, y la sibilancia recurrente. Cuando los dos padres trabajan, la guardería es necesaria. Todo en esta vida se tiene que hacer con sentido común.

-En su especialidad tratan también los trastornos del sueño. ¿Cuándo deben preocuparse los padres?

-Por un lado puede ocurrir por una mala educación, falta de rutinas. Hay que enseñar a los niños a dormir y a los padres a enseñarles. Por otro lado, hay que decir que entre el diez y el doce por ciento de los niños roncan, y el cuatro por ciento sufre apnea del sueño. Lo primero que tienen que hacer los padres en estos casos es acudir a su pediatra. Todo esto se puede solucionar quizás con una extirpación de amígdalas, que dan un gran resultado, u operación de las vegetaciones. Será el pediatra quien haga el estudio pertinente.

-El tabaco sigue siendo un grave problema entre la población y eso afecta a los más pequeños.

-Se estima que la mitad de los niños son fumadores pasivos, que un quince por ciento de los adolescentes fuma habitualmente, y que la edad de inicio está en los 13 años. Por lo tanto, es un motivo de preocupación, aunque la edad se mantiene estable y no está bajando. Ahora nos estamos encontrando con el fenómeno del cigarrillo electrónico, sobre el que falta regulación. Los estudios además no indican que ayude a dejar de fumar, sino que sirve de puerta de entrada para hacerlo al entenderse que no es perjudicial. Sin embargo, los agentes nocivos de una carga se corresponden con un paquete de tabaco. No tiene las mismas sustancias, pueden tener menos nicotina, pero sí otros agentes que pueden ser perjudiciales, por lo que también se debe evitar su exposición a menores.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios