Cierto es que los tiempos van cambiando, se van modernizando… y quizá, dejamos atrás esos recuerdos en tono sepia que, de vez en cuando, nos gustar recordar con añoranza.

Quizá por ello, las personas, las ciudades, … tratamos de mantener vivas nuestras tradiciones, porque en ellas guardamos la seguridad de un tiempo eterno. Ese tiempo que sabes que de esta manera no se perderá…

Han pasado siete años ya y una de las tradiciones más fuertes de Andalucía se ha vuelto a repetir… La Virgen del Rocío se ha vestido de pastora y visita su pueblo de Almonte… Devoción, fe, tradición, … a veces no bien entendida y respetada.

Cierto es eso de que para opinar sería necesario conocer. Porque, aunque suene a tópico, hay cosas que no tienen explicación… y hay que vivirlas sin más…

Una tradición arraigada en cada punto de España, así como en nuestra ciudad, El Puerto de Santa María, donde la familia rociera es grande y extensa; donde la fe se complementa con un hecho inexplicable, como es la masiva participación.

Es más, si lo analizamos desde el punto de vista cultural o promocional, hablemos de estadísticas… Una pequeña aldea, donde cada año se reúne más de un millón de personas… donde todo no es cante y baile… donde todo no es fácil… donde, sin duda, hay momentos que requieren un sacrificio.

¡Almonte! Decir Almonte es decir Rocío. Y el Rocío le aporta a una de nuestras comunidades una publicidad universal, que se extiende al resto de provincias, a cada una de nuestras ciudades, donde una Hermandad se erige en devoción a la pastora almonteña.

¿Cuánto habría que invertir para alcanzar una repercusión así? ¿Cuánto habría que trabajar, analizar, estructurar, …?

La devoción rociera ofrece a nuestras ciudades un pequeño reconocimiento universal. Deberíamos apreciar lo bueno que nos dan las tradiciones, tanto personalmente como desde las instituciones.

Quizá sea porque desde que nací estoy ligado a esa Blanca Paloma, … a esos momentos que no tienen explicación, a esa tradición que me hace regresar a instantes que para siempre quedarán en mi memoria y que puedo revivir cada año, sin que el tiempo hubiera avanzado tan rápido.

Como dice la sevillana, cuando pasen siete años, ¿quién te volverá a ti a ver? … y es que hay tradiciones y momentos que tardan mucho en llegar. Y el traslado de la Pastora llegó este año, ante la masiva devoción de los rocieros, que seguro pedirán su mayor anhelo: volverlo a vivir, a compartir, a seguir, … dentro de siete años…

Esperan meses en Almonte, visiones y recuerdos diferentes… La Virgen del Rocío, una vez más, ha sido el epicentro devocional de millones de personas."