'Una luz en el infierno', la nueva novela de Alberto Boutellier

Después de toda una infancia de aquí para allá, Alberto Boutellier se asentó en El Puerto y tras su forzosa jubilación empezó a escribir pequeños relatos y novelas que desembocan en libros como El Renegado o colaboraciones como en Ipolka 2, con un relato corto titulado 'Urkaildu', hasta llegar a Una luz en el infierno, su sexta novela, basada en hechos reales.

Se trata de una historia que llegó a él de casualidad. Aficionado a redactar relatos y artículos sobre política, se encontró con el personaje de su narración una de las veces que se encontraba en la Plaza de Abastos, sentado en el Bar Vicente, donde suele pasar las mañanas de los sábados, ya que es cuándo hay más bullicio y dónde él encuentra su inspiración.

Según afirma el escritor, el Guadalete es una de su mayor inspiración, sentarse en el parque Calderón, junto con lo que él llama el 'Mentidero de El Puerto' que engloba a toda la parte de la Placilla donde le gusta empaparse de las vivencias de la gente, del día a día de la vida cotidiana, de conversaciones y del trato con las personas cara a cara... Asimismo confiesa ser un fiel seguidor de Stephen King, de quién dice extraer la supresión de muchos de los contenidos para también dejar algo a la imaginación del propio lector.

Esta historia con reminiscencias portuenses y tangerinas recoge las duras y desafortunadas vivencias de la trayectoria de Jesús Montella, un personaje insólito según Boutellier, quien argumenta en su defensa que aunque sea todo un rufián, más que por su carácter han sido las circunstancias en las que se ha visto envuelto las que le han llevado a hacer algunas cosas que no debía . Desde el nacimiento de este personaje se vaticinaba una vida turbulenta, ya que un mes después de que su madre le diera a luz tuvo lugar la famosa explosión del polvorín de la Armada de Cádiz en 1947, que hizo que toda la Bahía se tiñera de rojo.

Tras una infancia de miseria como la mayoría de familias durante la postguerra, se dedicó al mar siendo marinero, maquinista, patrón y finalmente armador. A partir de ahí disfrutó de una vida acomodada que perdió por juntarse con compañías perjudiciales y que le llevó a pasar diez años en las terribles cárceles de Marruecos, donde descubrió esa luz dentro de aquel infierno.

Su libro se presentará este jueves, 2 de octubre, también en el Bar Vicente para rememorar su primera toma de contacto con el protagonista de esta novela negra en la que él se ha visto involucrado de tal forma que considera casi que ha perdido la consciencia de quién realmente era el que la relataba.

Dentro de sus próximos proyectos está otra novela que ya tiene escrita y que verá la luz. También, si hay suerte, le gustaría que Una luz en el infierno pudiera algún día dar el salto a la gran pantalla.