"¿Qué color tiene mi parcela?"

-¿De qué color te han puesto la parcela?

-De blanco, ¿y eso que significa?

-Pues aquí pone que es suelo no urbanizable.

-Pero, ¡si hay casas!. ¿Ahora vamos a tener que tirarlas?. ¡Vaya crimen!.

Ésta es una conversación que en la mañana del viernes mantenían dos personas frente a uno de los planos de la propuesta de ordenación urbanística de la ciudad. Hablaban del diseminado ilegal de El Carmen 2, ubicado junto a la Variante de los Puertos (A-4), que no será regularizado por estar en zona de afección de la autovía. El comentario no deja de ser anecdótico pero es uno de los centenares de muy diversa índole que se podrán oír durante los dos próximos meses entre las personas que acudan a ver cómo queda su 'parcelita' o su chalé en el futuro Plan General de Ordenación Urbana (PGOU).

Desde el pasado jueves se puede consultar en el Monasterio de la Victoria el documento de aprobación provisional 2 del nuevo ordenamiento municipal. En la iglesia de este edificio se han instalado 62 paneles donde se detallan la clasificación y calificación de los suelos a desarrollar durante los años de vigencia del futuro planeamiento así como otros aspectos tales como la propuesta de movilidad urbana, el precatálogo de protección de los edificios del casco histórico y el diseño de nuevas infraestructuras viarias y energéticas, entre otros. La muestra se completa con la proyección de un vídeo donde se esbozan las principales características y cifras del Plan General.

Tal y como era de esperar, la gran mayoría de las consultas en estos primeros días se centra en la legalización de viviendas. "Un promotor no va a venir a ver cómo quedan sus terrenos sino que casi todas las preguntas son del proceso de regularización". Son palabras de María Medina, que trabaja para Territorio y Ciudad, la empresa que ha redactado el Plan, y que se alternará con otros compañeros durante estos dos meses para resolver las dudas de los que acudan a la exposición.

Es difícil enfrentarse a la complejidad de un documento como un PGOU, especialmente si se es neófito en cuestiones urbanísticas, una especialidad con una terminología específica vagamente conocida. Eso sí, hay unos conceptos básicos que, generalizando, están empezando a ser algo más cotidianos, especialmente entre los propietarios de casas ilegales. "Hay muchas personas a las que les dices que su vivienda ha quedado sobre suelo urbano no consolidado y ya saben que es una categoría que viene a determinar que esos suelos requieren de una urbanización para ser regularizados, aunque sea un concepto mucho más amplio", indica Medina.

Con un simple vistazo al plano de ordenación estructural, es fácil saber si la vivienda entrará o no en el proceso de legalización. En él, la gran mayoría de los diseminados que serán regularizados viene marcada con color grisáceo (en tonos marrones si se consulta en el de ordenación pormenorizada). Por tanto, si tiene esta tonalidad "podemos estar tranquilos", tal y como le indicaba una mujer a su marido tras consultar el plano de clasificación donde aparece su vivienda en Arenas de Fuentebravía. También hay otro color para los núcleos que también serán regularizados, el amarillo, que indica que están incluidos sobre suelo urbanizable no sectorizado. En este caso, el procedimiento que deberán seguir los propietarios es distinto y más a largo plazo.

El 'problema' empieza a surgir cuando en el plano estructural aparece el diseminado con color blanco, o también el verde si se consulta el de ordenación pormenorizada (esto marca que el inmueble o la parcela se encuentra sobre suelo no urbanizable). En este caso, la regularización no será posible aunque se apuntan soluciones particulares para algunos de los diseminados que se hayan incluido dentro de la catalogación de suelo no urbanizable de especial protección medioambiental.

Por otro lado, hay una cuestión que sorprende a la representante de Territorio y Ciudad. "Los que vienen, preguntan poco por los costes. Por lo que he podido comprobar hasta ahora [hasta el pasado viernes] noto a la gente muy concienciada de que tienen que hacer frente a los gastos de urbanización, lo que ya es un gran avance", apunta María Medina. Al respecto asegura una señora que tiene una vivienda ilegal: "Nosotros estamos tranquilos, mi casa se va a legalizar y urbanizaremos la calle cuando nos digan, pagaremos y ya está", añade. Pero ¿esta disposición es generalizada?. Sólo el tiempo lo dirá puesto que aún es pronto para conocer los costes definitivos (aunque ya se han apuntado las primeras cifras).

Pero el asesoramiento sobre los paneles expuestos también surge de forma espontánea, y de manera solidaria, entre los visitantes. Este medio fue testigo de cómo un visitante explicaba a un matrimonio residente en Cantarranas de algunos de los pormenores del proyecto de urbanización. "Si los viales son de seis metros se tendrá que ampliar a ocho y pasará como en Bella Bahía, que tuvieron que tirarse hasta los muros de muchas casas", le indicaba. Y seguidamente señalaba: "Pero esto va a tardar en hacerse porque yo vivo en La Caridad y aquello es suelo urbano desde 1992. Fíjate que llevo 17 años esperando a que me urbanicen mi barriada".

Y, por supuesto, ya hay las primeras quejas por la calificación 'recibida'. Un propietario comprobaba que su parcela había sido incluida dentro de una zona de equipamientos públicos. "¿Y esto qué, me lo expropia el Ayuntamiento?", preguntaba. Con cierta paciencia se le contestaba que tiene derecho a unos aprovechamientos que podrá materializarlos con el desarrollo de la unidad de ejecución en la que está incluida su parcela. No obstante, el 'afectado' no se iba demasiado convencido.

También hay quien se resigna con lo que 'le ha tocado'. "Comprendo que Las Veguetas está lejos de la ciudad", decía el propietario de unos terrenos baldíos situados muy próximos a este diseminado de la Carretera de Sanlúcar. "¿Y piensa presentar alguna alegación al respecto?", le preguntaba este periódico. Entonces contestaba: "Creo que no. De todas formas, me han puesto los terrenos como suelo urbanizable no sectorizado así que esperaremos unos años".