El Festival de teatro de comedias enfila ya esta semana su recta final, tras la representación el sábado de la obra 'Entre bobos anda el juego', una comedia del siglo de oro  adaptada por Fernando Ramos que se enmarca dentro de las llamadas 'comedias de figurón'.

La obra, de Francisco de Rojas Zorrilla, pasa del verso a la prosa en esta función llena de situaciones de doble sentido y escenas que buscan la risa del público. El elenco, formado por siete actores, estaba dirigido por Paco Carrillo y desde luego cumplió su cometido, ya que sin grandes pretensiones y una escenografía muy funcional que era modulada por el propio elenco consiguió desatar las carcajadas del público asistente.

Como ya hemos comentado en otras ocasiones el público que frecuenta el festival es distinto en gran medida al de la programación del resto del año. Es un público que busca, sobre todo, diversión y pasar un buen rato con comedias ligeras y sin mucho trasfondo.  Se nota además que muchos de los asistentes optan por el abono, ya que es un público asiduo que suele acudir a todas las funciones.

En este caso todos los elementos, desde la escenografía hasta la iluminación pasando por las interpretaciones, fueron correctos, encajando así esta comedia a la perfección en la línea que sigue el festival, que no obstante sigue echando de menos el entorno del patio porticado de San Luis, donde la experiencia lúdica era más completa al aire libre y bajo las estrellas.

Tras esta representación le llegará el turno el fin de semana a otras dos obras, la versión musical de 'La venganza de Don Mendo', el viernes 19, en versión de José Sáiz, y el sábado 20  'Entre copas', con Juanjo Artero al frente del reparto.

Por otra parte el miércoles 17 se podrá ver las propuestas de Aquelarre Teatro y Balbo en el patio de San Agustín, dentro del ciclo destinado al teatro aficionado.