La asamblea feminista Las Tres Rosas ha mostrado su "total indignación ante el concurso de coquineras y coquineros que, de nuevo, se ha convocado y celebrado por la concejalía de Fiestas, con Ángel Quintana como responsable". Un concurso que, según la asamblea, en la edición 2017 "quisieron disfrazar de 'igualitario' modificando las bases, pero que ha puesto en evidencia la poca o casi nula preocupación del actual equipo de Gobierno por evitar la promoción desde la institución de concursos y valores sexistas".

Para Tres Rosas "resulta bochornoso cómo ha quedado avalada que la única preocupación de Fiestas y de la concejalía de Igualdad, que gestiona Matilde Roselló, ha sido una modificación de maquillaje de las bases del concurso, incluyendo la figura de un coquinero y un pase con un disfraz de carnaval. Parece que ninguno de los dos responsables han sido conscientes de que eso no supone promover un carnaval libre de estereotipos sexistas. Sólo ha sido necesario hacer una breve pasada por los disfraces de carnaval que portaban hombres y mujeres para poner en evidencia que este concurso sigue apostando por premiar la figura de la mujer como objeto que se exhibe a través de 'disfraces' que promueven la exhibición del cuerpo bajo los patrones de belleza dominantes. Muy distinto a los disfraces de ellos, reivindicando la gracia, sin tener que mostrar su cuerpo como aval para ganar el concurso. El concurso se ha centrado en la figura del hombre como figura principal de promoción del humor y de la gracia".

Las Tres Rosas afirma que ha sido forma clara de anclar la figura de la mujer en el carnaval en los mismos papeles sexualizados y estereotipados en cuanto a la cultura sexista en la que vivimos y que se sigue legitimando a nivel institucional. En definitiva, un concurso sexista que el bipartito de PSOE e IU ha intentado camuflar con unas bases que incluían ciertos matices que nos podía hacer esperar un cambio, pero que tras haber visto la celebración del concurso constatamos que todo sigue igual. Se vuelve a convocar un concurso que valora el físico, la belleza y el cuerpo de las mujeres en cada carnaval que se celebra en nuestra ciudad. Nuevamente se pone de relieve las prioridades del bipartito a la hora de repartir el dinero público para cubrir festejos con estas características y no utilizarlo para muchas otras prioridades, entre ellas, medidas reales para el fomento de la igualdad de género".

La asamblea feminista aboga por reformar la figura de las coquineras y el sentido del concurso, y por reivindicar otro papel de las mujeres en carnaval, "libre de estereotipos sexistas y presión estética. Un concurso que reconozca nuestra aportación artística y cultural a la fiesta. Volvemos a echar en falta la labor fiscalizadora y transversal de la concejalía de Igualdad. Lamentamos la oportunidad de cambio que el nuevo Gobierno local ha perdido; sigue tomándonos el pelo en lo que acciones de igualdad serias se refiere".