Este domingo, 27 de noviembre, se cumple un año desde que caducó el contrato entre el Ayuntamiento portuense y la empresa FCC, que regulaba el servicio municipal de recogida de residuos sólidos urbanos y limpieza de la vía pública.

Ya se habían agotado todas las prórrogas posibles de un contrato que había dejado licitado y adjudicado el anterior gobierno y que en su inicio funcionó correctamente, pero tras agotar esas prórrogas el 27 de noviembre de 2021, la ciudad se quedó sin contrato de ningún tipo.

La empresa FCC sigue prestando el servicio por obligación legal, pues ninguna prestataria de concesión municipal puede abandonar un servicio esencial para una administración con la que trabaje, pero el Ayuntamiento queda en evidencia, pues no ha hecho su tarea, que es sacar en tiempo y forma un pliego que regule las nuevas condiciones de un servicio, siendo además éste un servicio tan esencial.

La recogida de residuos y limpieza de las vías públicas constituye el principal contrato del Ayuntamiento portuense. Son más de 13 millones de euros del presupuesto municipal los que cada año se destinan a pagar este servicio. En concreto, mensualmente unos 1.044.000 euros de los impuestos de todos los portuenses se destinan a las facturas de FCC.

Además de su cuantía, también este contrato es esencial pues se trata de una prestación básica para la ciudadanía. Es obvia la trascendencia que tiene en cualquier municipio la correcta recogida diaria y la limpieza de los residuos que aparecen en la vía pública, y más en uno de 154 kilómetros cuadrados de extensión como es El Puerto.

El secretario general del PSOE, David de la Encina, ha explicado que “más allá de la pura evidencia de que no se ha trabajado desde el gobierno en sacar un contrato, los efectos de este incumplimiento tienen consecuencias para las calles, para la ciudadanía, para el servicio en sí y para el propio personal”.

Para el exalcalde portuense “las calles están más sucias que nunca y cuando se celebra algún evento se tarda más que nunca en recoger, se han dejado de efectuar las campañas de desinfección en los contenedores, no se reponen o se encuentran deteriorados”.

Por otro lado, a diario la maquinaria y especialmente los vehículos de recogida sufren averías, pues ya han llegado al final de su vida útil y es muy frecuente que no puedan salir a trabajar los operarios con esa maquinaria o con los vehículos por estar en averías continuas, de manera que las calles que deberían atenderse con las maquinarias o vehículo averiado se quedan sin tratar durante días.

Por último la plantilla, con más de 180 personas, no puede negociar la renovación de su convenio colectivo porque la empresa manifiesta que está fuera de contrato y no tiene garantía de continuidad.

De la Encina señala que “nos hacemos eco de este clamor vecinal, empresarial y de las personas que vienen a El Puerto y se lo encuentran con una imagen indecente e indigna. Nos hacemos eco del sentir de los barrios donde se están encontrando situaciones que hacía años que ya no se daban y nos hacemos eco también de la legítima aspiración de la plantilla para que se renueve un convenio de la mano de un nuevo pliego, por lo que exigimos a Germán Beardo que cumpla su palabra. Que ponga ya el pliego encima de la mesa y que cumpla con su palabra, con la ciudad, con las calles, con la empresa que tenga que venir y con la plantilla”, concluye.