Tras obtener todos los permisos pertinentes por parte del Ayuntamiento y de la Delegación de Cultura de la Junta de Andalucía, la empresa de aguas Apemsa ha retomado la segunda fase de los trabajos de restauración de la fuente de las Galeras, en virtud de un proyecto elaborado por un estudio de arquitectura local. El importe de los trabajos en esta fase es de 27.751 euros, más IVA.

La Fuente de Las Galeras Reales, situada en la plaza del mismo nombre, data de 1735. La finalidad del proyecto es realzar la imagen de este importante monumento del patrimonio histórico de El Puerto de Santa María, que es, además, el emblema de Apemsa desde hace más de 30 años.

Una imagen de la fuente en el año 1925.

Una vez se ha contado con las autorizaciones necesarias, se ha iniciado esta segunda fase del proyecto que consiste en devolver la fuente a su estado original en piedra, retirando el mortero y la pintura de color blanco con la que se pintó en algún momento. Lo más significativo de la fuente es el remate en piedra a modo de cornisa, donde se enmarca una especie de dosel pétreo cuyo motivo central, el escudo real, está flanqueado por dos leones rampantes envueltos por una decoración formada a base de roleos. Rematan la fuente cuatro jarrones esquineros y la corona real.

Precisamente, está previsto reponer uno de los pináculos superiores del escudo que ha desaparecido y una pequeña cruz sobre la corona, que falta. Además, se quitarán los azulejos de color azul y blanco de las dos cúpulas superiores, que también es un añadido posterior y se revestirá con ladrillo tosco. Otra mejora es la retirada de la actual puerta de hierro del lateral derecho y su sustitución por una puerta de madera de iroko.

Durante las obras han aparecido elementos originales que llevaban años ocultos a la vista

Una vez se ha retirado la pintura exterior, han quedado al descubierto varias regolas en los sillares originales que llegan hasta los grifos. Este desperfecto, con el que no se contaba, ha obligado a tener que reparar los sillares dañados.

En mayo de 2019 Apemsa encargó al arqueólogo José Manuel Lojo Galán, en colaboración con el restaurador municipal Juan José Delgado Aguilera, los pasos necesarios para la restauración de la fuente.

Una imagen de los trabajos de restauración de la fuente.

El año pasado se acometió la primera fase de estos trabajos, que consistió en su limpieza con un producto fungicida y herbicida especial para eliminar vegetación y microorganismos y la limpieza de la suciedad acumulada con el paso de los años de forma manual y mecánica con agua a presión, cepillos y jabón neutro.

También se pulieron y limpiaron los seis grifos de cobre y se dio una imprimación con un consolidante hidrófugo para proteger al monumento de agentes externos, además de reponer losas y escalones que estaban deteriorados.

En esta nueva fase se ha contratado los servicios del arquitecto Manuel María Fernández-Prada Navarro, que ha redactado el proyecto de restauración y se encarga de la dirección. La obra supone dos meses de trabajo pero, con los deterioros encontrados, se puede prolongar unas semanas más.

Desde 1588 El Puerto se abastecía de agua potable procedente de los manantiales de la Piedad, situados a cinco kilómetros de la población en plena Sierra de San Cristóbal. Debido al deterioro de las tuberías, en el siglo XVIII, bajo el reinado de Felipe V, se inició la denominada ‘Obra de la Fuente’, la mayor obra pública realizada en El Puerto de Santa María hasta el momento, de la que la Fuente de las Galeras Reales es su máximo exponente.

Como curiosidad, cabe destacar que existió una fuente gemela a la de Las Galeras dentro del Parque de la Victoria, que fue derruida sin que se sepa hasta ahora por orden de quien ni en qué fecha.