Marta eligió a Lucas, su juguete favorito y, simplemente, lo colocó debajo de la almohada. La jugada era fácil. Lo sacó en el momento oportuno, cuando él le practicaba sexo oral, con la intención de que lo sumara. Que jugara con ambos. Su pareja se bloqueó en cuanto esgrimió el conejito vibrador. Aquello ¿qué era? 

“Muchos hombres se bloquean cuando un juguete sexual entra en sus camas porque se sienten atemorizados. ¿Es que no te gusta conmigo? ¿Necesitas más?— Carol Armero, sexóloga, responde a esta cuestión,  Se hacen preguntas muy complicadas para devaluarse a sí mismos cuando lo que deben saber es que, si dominan la juguetería, serán mucho mejores en la cama”. 

La juguetería erótica es un complemento perfecto para la sexualidad. Que las parejas introduzcan juguetes sexuales es todo un experimento. Hay que aprender cómo funciona, que no siempre son tan evidentes. Hay que jugar con ellos, probarlos. Cambiar las rutinas sexuales ayuda a que las parejas sean más felices. Y los juguetes ofrecen muchas posibilidades. 

Juguetes sexuales

Uno de los principales motivos de la ruptura de pareja es la rutina sexual en la que se cae con que se lleve demasiado tiempo. Se recomienda encarecidamente que intenten romperla como pueden. Y un juguetero de nada puede convertirse en la mayor diversión de sus vidas. Empiecen con algo sencillo. Los vibradores pequeñitos son un buen comienzo. Y pueden sofisticarlo hasta hacerlo por control remoto.  Martúrbense uno al otro. 

¿Qué juguetes podemos usar? ¿Cómo se hace?

En realidad, todos. Porque con todos se puede disfrutar, pero por si quieres ideas: 

1. Vibradores: Si quieres jugar a masajear a tu pareja porque los vibradores, no solo los puedes usar en tus cavidades, que por supuesto. No hay vibradores masculinos y vibradores femeninos. Usa un condón cuando lo use él y listo. 
2. Dildo: Los dildos son divertidos. Se pueden usar mientras practicas sexo oral y así a tu pareja le gustará más. Valen lo mismo para chicos que para chicas. Ya sabes, cuando lo use él, protege con un condón. 
3. Esposas: Qué divertido es que te aten y atar. Unas buenas esposas te ayudan a que no destroces tus mejores pañuelos. Y, encima, hay modelos súper divertidos. 
4. Pregunten Porque, aunque no lo crean, haya juguetes específicos para que jueguen con otras personas. Pregunten en su tienda, pregunten a su sexóloga, déjense aconsejar. Si les da apuro acudir a un sexólogo o no pueden pagar su consulta, vayan a la tienda donde los venden y pregunten. Les informarán con todo lujo de detalles. 

Pero hagan de sus encuentros algo estupendo. Y ayúdense de la parafernalia que crean necesaria. Que la hay.