Rock Hudson, uno de los más famosos galanes de Hollywood, murió ayer en su casa de Los Ángeles víctima del SIDA, la terrible enfermedad contra la que llevaba luchando un año.

El actor había dado a conocer públicamente su enfermedad el pasado verano, cuando se trasladó a París para someterse a un tratamiento experimental contra el SIDA. También reconocía su condición de homosexual, dando lugar a toda clase de comentarios y reacciones.

Hudson es la primera víctima de Hollywood que causa el síndrome de inmunodeficencia adquirida, si bien esta enfermedad ya se ha cobrado muchas vidas en todo el mundo.

Rock Hudson contaba con 59 años de edad y había sido considerado el galán perfecto. Debido a la enfermedad su físico sufrió un declive progresivo visible por todos. Durante cuarenta años su carrera estuvo rebosante de éxitos de cine y televisión.