El tipo. Delincuentes ochenteros. Las coplas. Una comparsa que suena a comparsa, aunque parezca redundante. Navajas afiladas para mostrarse muy punzantes. Vera Luque demuestra que maneja al dedillo el Concurso del Falla. Un tipo y un concepto que atrapan se prestan con extrema facilidad para desarrollar toda la lírica, pero de forma muy directa, tanto por el retrato social que evoca, su transformación en la actualidad y su desarrollo como por las formas, que son muy importantes para darle brillo a un tipo de comparsa que parece en extinción. Si a todos estos ingredientes se suma la alta calidad de las letras, esta comparsa mira sin temor a sus competidoras. Pegan fuerte los dos pasodobles, aunque juegan en diferentes ámbitos. Muy bueno el primero en defensa del Carnaval oficial frente a las críticas del mundo callejero potenciadas por la ruptura entre ambos debido al cambio de fechas. Con una cerveza de por medio, les rebaten que digan que en el Falla no esté la pureza y la esencia cuando “detrás llevo a un Monzón”, por lo que limarán asperezas borrachos cantando El Vapocito y Vuelve ya el 3x4. Durísima y merecida crítica a Macarena Olona en la segunda letra por hacerse pasar por andaluza, por lo que le dicen que “no tiene ni la sangre ni la categoría” para ser quien levante Andalucía.Los seis cuplés marcan diferencias dentro de la modalidad, sobre todo por las dudas de ver lo que hacen los que venden coca... cola entre el Carnaval y el Rocío, y todo lo que hace Casemiro sin llevarse ni una tarjeta amarilla.

Veredicto del Diario de Carnaval

Muy buena.

Actuación en preliminares

El tipo. Delincuentes. Las coplas. Estética ochentera. Un sonido de otra época. Cánones que ya no se llevan por culpa de la modernidad y la evolución –en algunos momentos, mal entendida– de un Carnaval que se aleja de su esencia. José Antonio Vera Luque, tras ejercer un dominio absoluto en chirigotas, rompe la baraja en su cambio a comparsas jugando a una cosa muy diferente de lo que hace el resto, pero con un sabor y un gusto al que no se debería haber renunciado. Un repertorio muy completo por concepto, ejecución y, sobre todo, por ser una comparsa que suena a comparsa. Quinquis cuya única salida es delinquir con una navaja que puede dar una puñalada directa al corazón. Y tanto que llegan desde una presentación en la que ya evidencian unas formas tan reconocibles como añoradas, al igual que con un pasodoble con regusto a otra década, sin complicaciones y con estructura clara. Muy emocionante la primera copla en homenaje a los trabajadores del hospital Puerta del Mar, una letra que fue prometida por la recuperación de Miguel Ángel Puchi tras sufrir el COVID . Muy contundente y bien llevada la segunda letra contra “los obreros de derecha”, esos que son “meallantas del negrero” y que pueden hacer que el fascismo llegue al Gobierno. Por primera vez, una comparsa pone al público en pie en los cuplés, de nuevo en tandas de tres. Genial el último al mote de “carapolla” al alcalde de Madrid, lo que es “una falta de respeto a las pollas”. El retrato social y del quinqui de barrio deja un popurrí de altura.

El veredicto de Jurado Diario

Muy buena

La previa

Comparsa 'Los quinquis'

Uno de los grandes alicientes del Concurso del Gran Teatro Falla de 2022 va a ser el paso de José Antonio Vera Luque a la modalidad de comparsas. Este es un asunto que viene de lejos, ya que cuando no ejercía su tiranía en chirigotas muchos aficionados le pedían que probara con este cambio. De hecho, incluso le cantó un cuplé a este asunto con 'Los que van por derecho'. 

Pero este 2022 va a ser tan atípico que Vera Luque, por buscar una nueva motivación y ante los condicionantes que supone montar un repertorio para el certamen de la primavera, ha decidido presentar una comparsa, pero solo por un año, ya que en 2023 volverá a la chirigota, su hábitat natural, con 'Frente Talibán de la República Irreverente de Kadicadistán'. 

Esta comparsa llevará por título 'Los quinquis'. La idea que ronda en el grupo de Vera Luque es presentar una comparsa clásica con cierto olor a los años 80, lo que puede ser totalmente rompedor en una modalidad cada vez más compleja. Un elemento que altera por completo la competición, por lo que, a priori, esta agrupación aspira a lo máximo. 

Vera Luque ha sido el auténtico dominador en la modalidad de chirigotas en la última década, sumando un total de seis primeros premios desde que lo hicieran por primera vez en 2010 con 'Los que van por derecho'.