La actividad deportiva municipal de Cádiz sigue amenazada con su paralización a partir del lunes, después de que la reunión de ayer entre la empresa concesionaria y el Ayuntamiento no sirviera para desbloquear la situación creada con el anuncio de Eulen de suspender los servicios por el impago del Instituto Municipal del Deporte.

Aunque los trabajadores ya han recibido un comunicado en el que también se les confirma la intención de presentar un expediente de regulación temporal, el secretario general de Autonomía Obrera en Cádiz, Manuel Gómez Bienvenido, reta a la empresa al adelantar que "irán a sus puestos" y recuerda que la prohibición de acceso sólo puede hacerla el IMD, "que en ese caso tampoco podría dejar entrar a los usuarios porque no habrá ninguna actividad sin la presencia de los trabajadores".

"Animamos a Eulen a que paralice el servicio porque entonces exigiremos el rescate al IMD", advierte el sindicalista, que carga contra la empresa al indicar que "pudiendo rescindir el contrato por impago de más de ocho meses, opta por una suspensión mintiendo y utilizando a los trabajadores, llegando a tomar represalias contra un delegado sindical al no abonarle la nómina de noviembre".

"No puede mandar a los trabajadores de vacaciones pues éstas tendrían que ser de mútuo acuerdo y con dos meses de antelación; interpondremos denuncias", avisa Bienvenido, indignado porque "es inadmisible suspender el servicio por el retraso en las facturaciones y argumentar para el ERTE motivos de producción u organización, cuando al ser una empresa concesionaria, en el pliego de condiciones ni Eulen organiza ni produce. Me temo que está apuntando sin llegar a disparar".

Por último, también manda un mensaje al IMD: "Otra Delegación les está sacando del atolladero".